RUPTURA

Luisito y Francis Pérez salen del apoderamiento de Pablo Aguado


miércoles 14 octubre, 2015

Se queda sólo Enrique Peña al cargo de la carrera del joven sevillano

Se queda sólo Enrique Peña al cargo de la carrera del joven sevillano

Los apoderados Luisito y Francis Pérez han
salido del apoderamiento del novillero con picadores sevillano Pablo Aguado,
tal y como el mentor francés ha señalado esta misma mañana a CULTORO. Así pues,
se queda sólo Enrique Peña al cargo de la carrera del joven hispalense. En
palabras de Luisito a este medio, «desde su debut en la novillada sin
picadores en 2013, he sido encargado, con el apoyo de Francis Pérez, de llevar
su formación y carrera. En 2014 Enrique Peña se unió al equipo”.

Además, el galo añade que «Pablo
y yo tenemos desacuerdos sólo y exclusivamente taurinos sobre el camino a
emprender y las maneras de hacerlo. Al no encontrar un punto de acuerdo, el
señor Pérez y yo hemos tomado la decisión de dejar su carrera sintiéndolo
profundamente. Quiero agradecer a todos los que confiaron en nosotros y nos han
apoyado en estas tres temporadas: empresas, prensa, aficionados, ganaderos,
amigos…dar gracias también a Pablo por su confianza en este período y desearle
toda la suerte del mundo en la nueva etapa que comienza”.

COMUNICADO PERSONAL DE PABLO AGUADO SOBRE LA RUPTURA CON EL MAESTRO LUDOVIC LELONG
«LUISITO»

Hace tres años cuando me rescató de sueños que creía inalcanzables. Hace
tres años que confió ciegamente en mí, que me apoyó, que empezó a luchar siendo
su entrega, su verdad, su corazón, su cariño y total creencia hacia mí y su
desbordada afición y amor al toro sus armas, y me colocó en una situación de
prestigio. Con él empecé a entender la dureza del toreo, la disciplina, el
esfuerzo. Aprendí que el trabajo paga, que la constancia te devuelve el
esfuerzo, que queriendo se consigue todo. Me hizo hombre. Me abrió los ojos, me
enseñó que una cosa es jugar al toro, y otra el toreo. Me abrió la llave de una
Francia que adoro, pasé fronteras, conocí mucha gente de su mano, grandes
amigos, y me enseñó a saber quienes no lo eran y a ir siempre de frente y sin
dobleces. Buscó la perfección, el no conformarse porque todo es mejorable. Me
abrió su casa, su familia y sus amigos y me llevó de la mano por la Sanlúcar
que forja mi preparación. Y lo más importante, encontré a un Amigo, con todas
las palabras, y faltan.

Son circunstancias puramente taurinas las que hacen que el maestro
Luisito salga del equipo, formado junto con el maestro Enrique Peña. Pocas
personas son capaces de desvivirse por un chaval como él lo ha hecho, siendo su
única pretensión dejar colocado en buena posición a alguien en quien cree,
mientras

sacrificaba tiempo que debía ser para su familia, sin buscar su
beneficio, sólo en busca de su amor a la tauromaquia. Y eso le honra como
taurino pero sobre todo como persona. Y por todo ello seguiremos unidos
personalmente, porque lo quiero y porque me quiere. Y porque le debo lo que
soy.

Pablo Aguado.

Sevilla, 14 de octubre de 2015.