ENTRE ARTES

Si vienes a Olivenza, apunta el menú


viernes 6 marzo, 2015



En el pasado Congreso
sobre Turismo Taurino
, celebrado hace ahora una semana en Badajoz, Fernando Valbuena de la Academia Extremeña
de Gastronomía
y Javier García del Restaurante Lugaris-Badajozse encargaron de hacer la boca agua a los asistentes mientras exponían con
pasión, la receta de diferentes platos típicos extremeños como fueron unas
migas y una caldereta.
Una ponencia que fue corta en relación
con la amplia oferta extremeña donde las recetas se elaboran con productos del
campo como son los espárragos trigueros, cardillos, criadillas de tierra y
setas, junto con otros platos más elaborados con carne de caza de la zona como
la perdiz, conejos, palomas, tórtolas y venados. Destaca también en Extremadura
la matanza del cerdo, que se convierte en un acontecimiento lúdico y familiar
que gira en torno al sacrificio del cerdo, del que se aprovecha prácticamente
todo, dando lugar a: chorizos, morcillas, salchichas, lomos, morcones,
paletillas, jamones y otras chacinas que
dan su punto de sabor a los cocidos, ollas y migas.
El jamón debe destacarse como producto
estrella gracias en gran medida al trabajo realizado desde el proyecto de la
Denominación de Origen «Dehesa de Extremadura” que cuenta
en su haber con casi un millón de hectáreas componiendo un paraíso ecológico
donde conviven de forma armoniosa diferentes especies.
Un producto único, el cerdo ibérico,
convertido en tradición y máximo exponente del saber hacer en sus tres
vertientes; bellota, recebo y cebo de campo. Cuenta además este producto con
unas rutas turísticas específicas para no perderse detalle, son el caso de: la
ruta por la comarca de «Tentudía”, «Zafra
Río Bodion”, «Llanos de Olivenza”, «Sierra suroeste”, «Campiña sur”, «La Serena”,
«Vegas Altas”, «Tierra de Barros”, «Vegas Bajas” y «Tierra de Badajoz”.
No pueden olvidarse otros platos
típicos con base de carne como son: el hígado de cordero encebollado asado,
cabrito y el cochinillo. Un amplio abanico de propuestas que siguen sumando con
el también muy típico bacalao y las tencas fritas, así como sus conocidísimos
quesos de cabra y la Torta de la Serena.
Las comidas se riegan con buenos vinos
denominación de Origen Ribera del Guadiana en su variedad de blancos, rosados y
tintos, antes de poner el punto y final con sus postres típicos entre los que
destacan las calderillas, perrunillas, bollos de chicharrones, arrope,
hojaldradas de almendra y la técula-mécula.
Para los amantes del vino la provincia
de Badajoz cuenta también, al igual que con el jamón, de una rutas específicas
donde ahondar más en cada una de sus variantes.
Demasiados manjares en tan pocos
párrafos, y es que Badajoz es un inmejorable destino gastronómico donde suman
enteros productos y calidad. Una gastronomía con historia, heredada y
transmitida de generación en generación y que mezcla las diferentes culturas
que han pasado por sus tierras.