Corrida de toros de Alcurrucéncon desiguales hechuras y comportamiento. Muy fuerte el lote de Ferrera y con nulas opciones de
triunfo. El de Bautista, dos toros
que se dejaron con posibilidades. Para El
Capea, uno muy deslucido y otro que pidió oficio. Todos embistieron
condicionados al flamear de los engaños por el fuerte viento. Una corrida que
de ser toreada en los medios hubiera tenido un resultado artístico muy
diferente, con más de un asado desorejado.
1º. Nº 69. ‘Amoroso‘. Colorado. 9/10. 609 kilos. Antonio Ferrera.
Un toro atacado de morfología. Astado largo, quebrado, apretado de romana,
pero en la línea de la casa y colocado de pitones. No humilló en el saludo de Ferrera. Salió suelto y se sintió más
cómodo en los terrenos de sol. Recibió dos puyazos en uno, muy largo el
primer encuentro y más liviano el segundo. En ambos, cumplió, empujó en el
primero.
En banderillas embistió muy fuerte con un galope rápido y continuando sin
humillar. En el último tercio el de Alcurrucénno perdió un punto de fiereza. Arrancada violenta, fuerte y empujando para
dentro, siempre sin echar la cara abajo. Tuvo transmisión y movilidad sin
lucimiento. Astado muy áspero.
2º. Nº 200. ‘Palillo‘. Negro listón. 3/10. 564 kilos. Juan Bautista.
Toro más bajo que el abreplaza, bien hecho. Astado con cuello, sin
estridencias en su cornamenta. El segundo de la tarde humilló en el capote de Juan Bautista permitiendo un decoroso
saludo. En varas realizó un cumplidor tercio y en banderillas no planteó
complicaciones. Hizo cosas interesantes y prometedoras durante la lidia. Lo
apuntado, lo reafirmó en las primeras embestidas en la muleta. Acometidas de
calidad por ambos pitones. Sacó humillación, repetición y bondad además de un
buen tranco. Toro obediente al toque, con transmisión que quería todo por
abajo. Lástima del fuerte viento porque a veces el flamear de la muleta
deslució el muletazo. Astado que permitió el toreo y lució virtudes.
3º. Nº 30. ‘Cumbre-roja‘. Negro bragado meano calcetero. 9/10. 534 kilos.
El Capea.
El tercero era más escurrido de carnes y hubo algunas protestas por su
presentación. Trapío justo, sin estar rematado, de cara lavada, estrecho de
pechos y culata de pollo. Anovillado el primero de Capea. Se durmió en el peto dejándose pegar y en banderillas soltó
un poco la cara. Con la muleta resultó deslucido faltándole transmisión pero
dejó ver humillación y nobleza. Toro frío de comportamiento y sin demasiadas
complicaciones salvo su falta de emoción.
4º. Nº 39. ‘Arrogante‘. Negro listón chorreado. 10/10. 573 kilos. Antonio
Ferrera.
Un tío el cuarto. Toro fuerte de trapío, grandón y ofensivo. Un astado de
«arrogante estampa» que imponía mucho. Deslucido el saludo por su
embestida y el vendaval incesante. El segundo del lote, manifestó no querer
caballo y salió suelto al que hacía la puerta en la primera vara. Pegó una coz
al cerrarlo en un burladero dejando claro su falta de casta y mansedumbre.
Banderillas embistió suelto y a su aire.
Llegó al último tercio con una embestida desigual, sin ritmo y queriendo
enganchar la muleta en cada embroque. Empujó para adelante pero sin clase.
Complicado sin regalar nada, se movió con mucha dureza sin emplearse jamás.
5º. Nº 15. ‘Peladito‘. Negro listón. 11/09. 560 kilos. Juan Bautista.
El quinto, un cinqueño que lució hechuras de línea ‘Villamarta’. Bajo de
manos, abriendo la cara y enseñando las palas. Bien rematado. Toro largo que
manseó en todos los primeros tercios, no en vano, se picó a salto de mata tras
huir de los capotes. Puso complicaciones a los de la plata en banderillas
esperando mucho al encuentro. Antes, en el recibo no paso nada por comportarse
abanto.
El segundo del lote de Bautista,
rompió para adelante por el pitón izquierdo, tomando la muleta con claridad por
ese lado. Alcurrucén que permitió
expresarse al francés con embestidas francas. Duró hasta el final, se dejó.
6º. Nº 13. ‘Guitarra’. Negro Listón Chorreado. 10/09. 552 kilos. El Capea
Toro muy bajo que mantuvo el interés en el tanteo inicial. Se dejó pegar y empujó
en sus entradas. Complicado en banderillas y cerca estuvo de prender a la
cuadrilla. Encastado. Astado que se metía por dentro aunque humillando. Reponía
con prontitud desplazándose con transmisión y entrega. El sexto fue muy
toreable y pidió un matador con más oficio.
