A pocos días de su comparecencia
en su tierra, Antonio Ferrera nos
atiende cordialmente, se le nota reposado con ganas de hablar de toros, viene
de tentar a campo abierto, según nos cuenta ha sido un momento mágico e
inolvidable a la caída de la tarde, todo improvisado y sin prisas, como en el
toreo apostilla entre risas.
Por sus palabras se le nota muy
ilusionado con el momento por el que pasa, está a gusto, como se suele decir, «se torera como se es y también como se está». Sevilla le deja un regusto especial,
dos años consecutivos lleva triunfando en el coso de El Baratillo, según nos cuenta, un sueño cumplido.
Tras un rato hablando de toros,
decidimos conectar la grabadora y empezar con la entrevista, se hacía tarde,
las manecillas del reloj pasaban volando.
-Llega
ahora la feria de su tierra, cartel de extremeños con Perera y Talavante, ¿cómo
afrontas el compromiso?.
Pues fíjate, es mi tierra,
con dos toreros también importantes y en la que la afición está muy ilusionada
con ese día, afronto dicha tarde con gran ilusión y la máxima fe de que sea un
día y una tarde especial. Vivo un momento bonito en mi carrera, me encuentro a
gusto y feliz delante de la cara del toro, ojalá en Badajoz pueda dar la
dimensión que mis paisanos esperan de mí.
–Todos recordamos aquella encerrona con victorinos que supuso un punto
de inflexión y un cambio en su carrera.
Fue un paso importante en el
camino, no creo que cambiara nada en el sentido de que yo cambiara, sino que
fue una apuesta personal y sobre todo un reto como torero el hacerlo y alcanzar
una cota tan importante, gracias a Dios conseguí. No cabe duda que a partir de
esa tarde crecí como torero y como artista.
-Podemos
considerarte un torero completo, dominas capote, banderilla y muleta, además de
ser un torero con un enorme oficio, pero ¿En qué momento se encuentra actualmente
Antonio Ferrera?.
Yo la verdad es que no soy
muy de momentos, ya que después de 18 años de alternativa los momentos son muy
relativos, pero si siento que mi profesión me está aportando y me aporta muchísimos
vértices para ser el torero que siempre he sido, que quiero ser y el que cada
día busco transmitir ser. Yo creo que es una cuestión de una inercia natural y
bueno siempre habrá mejores momentos, peores momentos, pero sobretodo
afianzados en ser tú mismo y al final sentirte libre como torero.
-Por
la carrera de Antonio Ferrera han pasado infinidad de toros de encastes
diferentes, ¿Crees que es bueno esa diversidad para enriquecer la tauromaquia?.
Si, no cabe duda de que hay
que intentar indagar en la personalidad de cada encaste y cada ganadería, ya
que estas siempre te aportan, es un compromiso y una responsabilidad como
torero, pero que en mi caso siempre la he llevado por muy buen camino en ese
sentido hacia mí, intentando siempre buscar los entresijos importantes de cada
toro, independientemente de la ganadería o el encaste que sea.
-Una
persona fundamental en la tapa de Antonio Ferrera ha sido Raúl Gracia «El
Tato», que te ha aportado o que has encontrado en esta etapa junto a él.
Yo creo que al final un
torero tiene bastante gente a su alrededor, pero en mi caso profesionalmente la
gente que me rodea siempre son personas que aportan su responsabilidad como
profesionales, y la verdad que Raúl tanto en la etapa como apoderado y en la
anterior en la que nos conocíamos como toreros me ha aportado conocimientos que
me han servido mucho, tanto dentro como fuera de la plaza, yo creo que son de
esas personas con que encajas desde un principio.
-Las
carreras de Raúl y la tuya van muy ligadas, no habéis tenido una carrera fácil,
siempre con corridas exigentes, supongo que los consejos del maestro te habrán
ayudado en este sentido.
Así es, en ese sentido vamos
muy encaminados, yo tomé la alternativa con una de Victorino entonces como bien
dices Raúl ha tenido una carrera muy parecida a la mía, con triunfos ante
corridas de este tipo, y bueno todo eso también aporta cosas buenas y cosas positivas.
Sin ir más lejos una de sus mejores faenas fue a un toro de Victorino en
Sevilla al igual que me pasó a mi tanto el año pasado como este, creo que las
carreras de Ferrera y El Tato tienen una conexión especial.
-Has
estado vinculado desde el principio a la carrera de Garrido, podríamos decir
que lo viste nacer y crecer como torero, supongo que la tarde de Santander será
especial para ambos.
Un día ilusionante, pero
creo que no hay que enfocarlo como dos toreros amigos que se ven en el ruedo,
creo que ambos cuando hagamos el paseíllo no vamos a pensar en amistades, esa
tarde los dos competiremos por el triunfo. Es un día donde tendremos dos toros
cada uno, vamos a tener nuestra responsabilidad, nuestros entresijos
interiores, somos dos toreros que creo que saldremos a la plaza a darlo todo independientemente
de lo que nos une fuera.
-La
etapa de José como novillero fue triunfal, pero ahora cuando ya es matador de
toros no se está viendo reflejado con contratos en la plaza, sería bueno dar
paso a jóvenes valores como Garrido o muchos otros que no hacen sino regenerar
la fiesta.
Pues sobretodo porque que se
lo han ganado y tienen fundamento claro para que estén ahí, son toreros nuevos
a los que hay que ir dando oportunidades para que vayan andando sus carreras, ya que son la savia nueva del torero, el
futuro de la tauromaquia. Respecto a José, el lleva desde que empezó sin
caballos haciendo cosas muy importantes como torero, cosas que se quedan
grabadas históricamente, por ejemplo la tarde de Sevilla saliendo por la Puerta
del Príncipe, las tres orejas en Fallas, su encerrona en Bilbao o su
presentación en Madrid, son hitos muy difíciles de conseguir y el los ha
conseguido con una capacidad, firmeza, claridad y sobre todo con una dimensión
de torero muy importante, esperemos que el tiempo, las suerte y las
circunstancias le dejen demostrar la clase de torero que es.
-Vivimos
una época de cambios tanto en la tauromaquia como en la sociedad, en la que se
está viendo un mayor interés por parte de la juventud hacia la tauromaquia,
gracias en parte a la promoción del espectáculo, ¿Cómo ve Antonio Ferrera el
devenir de la fiesta?.
Pues yo veo una evolución
natural y lógica, acorde también a la sociedad en la que vivimos, y sobre todo
a la base que debe sustentar el futuro de nuestra fiesta que es la semilla de
la juventud, a partir de ahí, hay que tratarla también con naturalidad, atraer
y compartir con la gente joven desde muy pequeños este mundo tan maravilloso
que es el toro, el cual transmite valores importantísimos como el esfuerzo, el
compañerismo o la capacidad de superación que también son fundamentes a de más
de en el torero en el día a día de una persona. Creo que la tauromaquia tiene
una riqueza enorme, como he dicho antes unos valores tremendos y lo que estoy
seguro es que no está en decadencia sino todo lo contrario veo chavales que
quieren ser toreros, jóvenes que se interesan por la fiesta, figuras que arrean
tarde tras tarde, yo confío en que a la tauromaquia le queda cuerda para rato.
