La corrida de José Escolarllegaba el sábado de Feria a la capital navarra con un cartel bien conocido por
los aficionados pamploneses. En primer lugar paseaba el torero de la tierra, Francisco Marco, seguido del aragonés Antonio Gaspar ‘Paulita’ en la búsqueda
de su propio camino y cerrado por el murciano Paco Ureña intentando salvar el error que tuvo en Madrid con aquel
gran toro de Fuente Ymbro que se le
escapó de las manos en el inicio del serial.
Precisamente el murciano fue el máximo triunfador del festejo.
Sumó una oreja a cada toro, que la valió salir en hombros por tan preciada
puerta. Al margen del legítimo triunfo cosechado por Ureña, le sirvió la conquista, para dejar las cosas en su sitio y
demostrar que lo de Madrid fue un error del que ha sabido reponerse. Paco ha macerado la equivocación
isidril, conocedor de que un nuevo tropiezo en una feria de tan importante
relevancia le dejaría k.o. Ese amasado han sido sus cartas, ofreciendo la
cabeza fría, la fe en sí mismo y por supuesto, la entrega a su fiel concepto.
También es significativo que los toros más propicios para el triunfo les ha
tocado en suerte, pero esta vez la suerte la buscó con buenos argumentos el
diestro de Lorca. Puerta Grande que
le sirve de gran inyección moral y de paso, para borrar las dudas que se habían
creado. Un debut soñado en San Fermín y una tarde que lo afianza de nuevo en el
circuito.
Paco Ureña recibió al tercero de la
tarde con un buen ramillete de verónicas. Hubo compás y sabor en cada lance.
Derribó al piquero y dejó estar a los de plata en banderillas. En el último
tercio el de Escolardesarrolló sentido en algunos embroques. Sin embargo, en otros se los tragaba
aunque el que tragó fue el murciano sin amilanarse nunca. Embestida muy
irregular que hizo que Ureña empleara
ofició y valor para pelearse literalmente ante su áspero enemigo. Le tocó las teclas al de Escolar y supo someterlo. Hubo un par
de tandas al natural de mucho mérito, donde el diestro lo embarcó alargando la
embestida y aguantando los pitones en la chaquetilla con los de pecho. Mucha fe
y disposición en Paco que remató con
gran estocada en los medios. Oreja que arranca a base de entrega. El cierra
plaza, fue el toro que más claro embistió en el capote y Paco Ureña lo supo ver. Le enjaretó un recibo bellísimo por
ejecución y plasticidad. A último, le castigaron lo justo y le hicieron las
cosas a favor en la lidia. Ureña lo
brindó al público y sin probaturas se puso a torear con sinceridad. Tuvo clase y
ritmo el sexto en la muleta. El murciano le abrió el camino iniciando por abajo.
Después le ofreció la muleta con la diestra adelantada para enjaretar varias
series limpias. El toro giraba al rededor del torero sintiéndose el matador en
cada derechazo. Con la zurda, imprimió recorrido en línea dando profundidad en
cada natural. Se llevó el lote pero supo entenderlo y torearlo. Casi entera en
buen sitio y oreja a sus manos que premia su notable actuación.
El primer toro tras rematar en un burladero se quedó descoordinado
y el palco devolvió a los corrales. Por propia petición del matadorFrancisco Marcosalió el sobrero – En Pamplona se
puede decidir si correr turno o pedir el sobrero-.El primero bis, de la
misma ganadería, salió con poco recorrido en el capote que le ofreció Francisco Marco. El navarro lo recibió
con una larga cambiada y varias verónicas de buen gusto, ganando terreno en
cada lance hasta soltarlo en los medios. En varas se cumplió el trámite sin
obligar el picador, ni tampoco emplearse el de Escolar. El abreplaza, llegó justo de todo al último tercio. En los
primeros tanteos muleteriles se vencía por el derecho y embestía a media
altura. Por el contrario, iba algo dormido pero conocedor de donde estaba el
torero y además falto de transmisión por ambos pitones. El diestro local, lo
sacó hasta los medios y le plantó la muleta en su justa medida pero cualquier
intento artístico era en vano. No tuvo material alguno y sólo pudo justificar
su alta voluntad. Lo mató bien pero estuvo atascado con el descabello. Con el
cuarto, segundo del lote de Marco, la
cosa resultó parecida al segundo de la tarde. Un toro que se tapó durante la
lidia en cuanto a sus malas intenciones, pero justo al iniciar la faena
descubrió sus malignas embestidas. Antes en banderillas hizo pasar las de Caín
a los de plata. El diestro navarro no pudo hacer nada, salvo quitárselo del
medio pronto. Otro imposible.Muy mal lote.
El segundo de la tarde, no permitió el lucimiento a ‘Paulita’ en el recibo capotero. Un
toro que demostró mucha guasa en la lidia en todos los tercios. Soltó la cara
en cada embroque y se orientó a cada instante. Un claro marrajo que buscaba con
muchísimo peligro. Así llegó a la muleta de Antonio Gaspar. Toro imposible en cualquier tercio incluido el
último. ‘Paulita’ lo despachó aunque
el público se enfadó sin motivo alguno. No era toro para apostar a nada, ni tampoco
a la ruleta rusa. Un marrajo que terminó siendo un barrabás. El quinto era un
toro de impresionante arboladura. ‘´Paulita’le jugó muy bien los brazos y regaló varios lances cadenciosos con garbo.
Transcurría la lidia en un término medio tras la suerte de varas -le dieron
tela- pero cambió radicalmente y empezó a pegar arreones a todo lo que se ponía
por delante. Los de plata pasaron mucha fatiga con el capote y con los palos.
El matador aragonés estuvo a la defensiva ante el que cerraba su lote. Cierto
que por abajo se los tragaba a regaña dientes, pero había que aguantar la
violenta embestida inicial. ‘Paulita’.No era toro de triunfo, pero sí de otra actitud. Con este no lo vio muy claro.
FICHA DEL FESTEJO
Plaza de toros Monumental de Pamplona. Séptima de la Feria del
Toro. Corrida de toros.
Seis toros deJosé Escolar.Bien
presentados, difíciles y complicados. Destacó sobre todo el lidiado en sexto
lugar y también el manejable tercero.
Francisco Marco(azul
celeste y oro):Silencio y
silencio.
Antonio Gaspar ‘Paulita’(blanco y
oro): Pitos y silencio.
Paco Ureña(verde
manzana y oro):Oreja y
oreja
FOTOGALERÍA: EMILIO MÉNDEZ