HUELVA

Morante reivindica el toreo disfrazado de lince ibérico


jueves 30 julio, 2015

El torero sevillano compareció en el lugar de la cita luciendo un disfraz de lince ibérico, a pesar de lo cual los pequeños le reconocieron de inmediato mientras jaleaban su nombre

El torero sevillano compareció en el lugar de la cita luciendo un disfraz de lince ibérico, a pesar de lo cual los pequeños le reconocieron de inmediato mientras jaleaban su nombre

Se le esperaba con máxima expectación y no defraudó a nadie.
Morante de la Puebla sorprendió y entusiasmó a las cientos de personas que
abarrotaron la Plaza de las Monjas de Huelva para pintar una gran pancarta
reivindicativa junto a varias decenas de niños y niñas de la capital onubense
con el lema «Sí a los niños en los toros”.

El torero sevillano compareció en el
lugar de la cita luciendo un disfraz de lince ibérico, a pesar de lo cual los
pequeños le reconocieron de inmediato mientras jaleaban su nombre. «Es Morante,
es Morante”, decían ellos, mientras el lince torero y fumando un gran puro les
saludaba y abrazaba entre una nube de cámaras y las miradas alucinadas del
público.

Cuando Morante se deshizo de la cabeza de su disfraz, atronó una
cerrada ovación que premiaba y agradecía el gesto de imaginación y de
compromiso con el acontecimiento que, de esa forma, demostraba el diestro de La
Puebla del Río. «Si vengo a un encuentro con niños, pensé en hacer algo con lo
que sorprenderles y arrancarles una sonrisa”, explicó. «¿Y por qué ha elegido
un lince, maestro?”, le preguntó el conductor del acto, a lo que Morante
respondió: «Porque el lince es un animal en peligro de extinción y yo, como
artista, me siento así también ante tanto ataque a la Fiesta”, señaló.

Una
explicación que le daba todo el sentido a su puesta en escena en Huelva:
Morante lanzaba un mensaje claro con el lenguaje de su público ayer en la
capital onubense. Y de paso, lograba llamar la atención para que su clamor no
cayera en saco roto. Tras explicar su sorpresa, el torero se puso a lo que vino
y pintó, junto con los pequeños, una gran pancarta de ocho metros de ancho por
tres de alto con el lema antes mencionado. Una pancarta que lucirá cada día de
la Feria Taurina de Colombinas sobre el ruedo de la Plaza de Toros La Merced,
que este año dedica un protagonismo muy especial a los niños, a los que, por
ejemplo, ha invitado a la novillada que cierra el ciclo el próximo 3 de agosto.

No estuvo solo Morante de la Puebla en esta obra, ya que a él se unió un grupo
de artistas onubenses de diferentes disciplinas como los cantaores Arcángel, Argentina
y Jeromo Segura, entre otros. La convocatoria cumplió su objetivo por completo:
sacó el toreo a la calle, en pleno centro de Huelva, y la puso en manos de los
niños y lo hizo gracias a la capacidad de fantasía de Morante, quien no paró de
atender al público onubense con la misma gran sonrisa que les regaló con su
original presentación.