MADRID

Albert Boadella: “En el toreo la sangre no es kétchup y eso le cuesta entenderlo a la sociedad”


martes 25 octubre, 2016

Esta noche se celebró en el hotel Wellington un coloquio bajo el tema “La Fiesta en la Encrucijada”; participaron el dramaturgo Albert Boadella, el torero Luis Fco Esplá y el periodista M. A. Moncholi

Esta noche se celebró en el hotel Wellington un coloquio bajo el tema “La Fiesta en la Encrucijada”; participaron el dramaturgo Albert Boadella, el torero Luis Fco Esplá y el periodista M. A. Moncholi

JAVIER FERNÁNDEZ-CABALLERO

Con un gran ambiente y más de doscientos asistentes se
celebró esta noche en el hotel Wellington de Madrid, dentro del ciclo «Los
coloquios del Wellington”, una charla coloquio bajo un tema de plena
actualidad: «La Fiesta en la Encrucijada”. «La Tauromaquia es un arte reconocido como
Patrimonio Cultural de España, tanto por sus valores, como por su indudable
transcendencia económica y empresarial que genera riqueza y empleo”
,
era el lema de una mesa compuesta por el dramaturgo Albert Boadella, el torero
Luis Francisco Esplá, el periodista Miguel Ángel Moncholi y la también
periodista Ana Samboal como conductora del acto.

Albert Boadella dejó constancia de su pensamiento en pro del
toreo pero realista con lo que acontece en la sociedad actual: «No podemos
aceptar la colocación del animal en el mismo plano que las personas. Esta
sociedad se vuelve cada día más antitaurina. La Fiesta de los toros no ha
cambiado prácticamente en un siglo mientras han cambiado todas las demás artes,
algo que me parece formidable en cuanto a su conservación. Esto significa que
cada vez el alejamiento es mayor en relación a otras disciplinas artísticas. Es
éste un cambio moral, que significa una mirada distinta sobre los animales.
Estamos experimentado una sociedad alejada de este acto, el taurino, porque en
la plaza ocurre lo que de verdad ocurre en la vida
”.

Además, una de las frases que sobresalió en el discurso del
dramaturgo radicó en la siguiente: «La sangre no es kétchup y eso le cuesta
entenderlo a la sociedad”
, rematando su intervención afirmando que «prácticamente
nos mira la sociedad como delincuentes, por lo que los aficionados tienen que
poner las medidas oportunas para la defensa del toreo. Los toros no se
defienden por tradición, sino por ecología, por economía, por libertad, por la
poesía que lleva consigo. Con un trapo un torero es capaz de emocionarnos, de
ponernos el pánico sobre el cuerpo. No podemos aceptar la colocación del animal
en el mismo plano que las personas”.

Por su parte, el torero Luis Francisco Esplá intervino en la
mesa con su ya clásico discurso místico en torno a la profesión que profesa. El
maestro alicantino afirmó que «hay que admitir que está cambiando la
sociedad. Vamos a ver cambiar de aquí en adelante las relaciones humanas, las
sociales, las mercantiles… pero lo que más me preocupa es la velocidad. Lo
veo en mis hijos. Ha habido una evolución absoluta del rito del alimento, del
amor o de la música. Esta sociedad no va al rito, sino a la banalización con el
simple objeto. Yo le debo al toreo el que no haya banalizado nada en mi vida.
Ese café antes de vestirme me sabía a gloria, porque sabía que podía ser mi
último café. Soy agnóstico en la vida, en las religiones, pero tremendamente
respetuoso con todas ellas. Cuando digo que no creo miento: he creído en el
toro y eso me ha dado una humildad tremenda, un sentido de la convivencia
especial. Creo en los toros como un artículo de fe. Los taurinos damos un
ejemplo yendo a la plaza”,
rubricó su intervención.

Por último, el periodista Miguel Ángel Moncholi hizo un
repaso por la cobertura mediática de la tauromaquia en la actualidad, además de
analizar el presente y el futuro de la información de toros en los medios. «Somos
el segundo espectáculo en cuanto a ingresos de IVA, más que el cine nacional.
Pero en general hay un gran desconocimiento del mundo de los toros, la gente no
sabe lo que es el Toro de la Vega, no sabe la verdad del lancero. Creo que hay
soluciones, creo que la FTL hace un gran trabajo aunque haya llegado tarde”,
finalizó su intervención antes del debate en la mesa.