TORO POR TORO

Novillada de La Centinela desigual en presencia y comportamiento


domingo 30 octubre, 2016

Así se comportó el encierro de La Centinela con el que hicieron el paseíllo Andy Younes, Rafa Serna y Luis López en la apertura de Lima

Así se comportó el encierro de La Centinela con el que hicieron el paseíllo Andy Younes, Rafa Serna y Luis López en la apertura de Lima

TITO VEGA

 

 

PRIMER NOVILLO

El
primer novillo, para Andy Younes, se llamaba Retoño, número 59 con 450 kilos.
Fue aplaudido de salida, tomó con codicia lo que hizo el joven pero siempre
salía suelto, humillando por ambos pitones en el capote. Romaneó en el caballo,
mostrándose incierto en la muleta, intentando coger al matador. Se pasaron de
capotazos en la lidia. Terminó en las tablas. Pitos en el arrastre.

 

 

SEGUNDO NOVILLO

El
segundo se llamaba Cupido, número 71, con 400 kilos, color negro, alto de
agujas. De embestida larga, llevando a media altura la cabeza en el capote,
luego se fue empleando. Atendió bien el capote en la brega. Tuvo calidad en la
muleta, buena embestida pero se tuvo que hacer en los tercios el trasteo.

 

 

TERCER NOVILLO

El
tercer novillo, de nombre «Ranchero”, tenía 375 kilos, negro, bizco del
izquierdo. Embistió con brío en el capote, pero punteando para defenderse. Se
rebozó en banderillas. Noble, repetidor en la muleta, fue aplaudido el novillo
en el arrastre. Oreja.

 

 

CUARTO NOVILLO

El
cuarto novillo, «Príncipe”, de 380 kilos, negro número 74. Salió haciendo el
avión de capote, con codicia, buena pelea en el caballo y protestando los palos
en banderillas. Se le dio mala lidia, dando tornillazos en la faena de muleta y
quedándose corto y costando darle pases. Salió suelto además en el epílogo.

 

 

QUINTO NOVILLO

«pLebey”
nçumero 53 y con 405 kilos era el quinto. Toro brusco y sin emplearse de
capote. Colocaba mejor la cara por el derecho pero fue protestón.

 

 

SEXTO NOVILLO

El
sexto novillo, de 405 kilos, serio, con cara, muy ofensivo con 405 kilos.
Palmas se le dieron al salir, gazapeando de salida para transmitir luego. No le
puso las cosas fáciles al torero. Pitos al arrastre.