CRÓNICA, ZARAGOZA

Cuestión de fondo y formas


domingo 9 octubre, 2016

‘Rafaelillo’, ofreció la solera de un toreo para aficionados y Alberto Álvarez mostró sus buenas formas. Ambos pudieron tocar pelo. Torres no tuvo su tarde. La Quinta no terminó de romper.

‘Rafaelillo’, ofreció la solera de un toreo para aficionados y Alberto Álvarez mostró sus buenas formas. Ambos pudieron tocar pelo. Torres no tuvo su tarde. La Quinta no terminó de romper.
EMILIO TRIGO

La primera corrida de toros de la Feria del Pilar tenía lugar en la tarde de este domingo en la plaza
de toros de La Misericordia. Un
serio encierro -aunque muy desigual- de La
Quinta
esperaba en chiqueros a tres toreros con galones para este tipo de
corridas: Rafael Rubio ‘Rafaelillo’,
Ricardo Torres
y Alberto Álvarez.

Una terna que no encontró facilidades por parte del encierro de La Quinta, que resultó complicada y justa de raza. Sólo el buen quinto destacó por su alta
toreabilidad y enclasadas embestidas.
Sin embargo ese buen toro no fue
aprovechado por Torres que en
conjunto no tuvo su tarde. Un torero que torea muy poco y al que se le noto en
las formas la responsabilidad del compromiso. Bien distinto fueron las
actuaciones de Rafaelillo y Alberto Álvarez. El murciano demostró que el paso del tiempo le ha llevado a una madurez
plena,
donde ha sacado a relucir el gran lidiador que es, y la solera de un
toreo exquisito. Rafaelillo ofreció un
toreo con fondo y poder, ante el marrajo primero de casi seis años y con el
desigual cuarto. Por su parte, Alberto
Álvarez
, no se dejó nada en el hotel mostrando un buen manejo del percal y unas interesantes formas clásicas ante su
lote.

Serio toro el que abrió el festejo, con casi seis años cumplidos,
pues nació en octubre de 2010. ‘Buenasnoches’ asomaba dos importantes leños,
más descarado del izquierdo. El maestro Rafaelillo recibió sobre los pies con un manejo
del percal a la antigua usanza.
Sabor añejo en el saludo capotero. Tuvo el
primero un viaje corto y molesto cabeceo durante la lidia y de esa guisa llegó
al último tercio. Antes en la segunda vara recibió el castigo de las dos. En la
primera se dolió y escupió el peto. Él
abreplaza resultó muy complicado y difícil de principio a fin.
Astado que
jamás pasaba de la taleguilla y que desarrolló mucho sentido. Le faltó poder, a
veces iba dormido, pero nunca alargó el cuello buscando presa. No tuvo ni uno.
El de la Quinta, reservón y probón tuvo en frente a un Rafaelilo que impuso su criterio con raza y personalidad. Gran disposición y vergüenza torera del
murciano ante el imposible rompió plaza.

Se explayó Rafaelillo con el capote al recibir al cuarto. Verónicas con la solera del tiempo para
disfrute de los presentes, incluso intercaló alguna chicuelinas con los mismos
aires. A este no se le castigó en varas. Brindis público. De rodillas comenzó Rafael poniendo en liza una muleta cautivadora
donde fluyó un toreo asolerado
. Dio distancias y tiempo sin querer atosigar
ni obligar. Rafael compuso una
personal faena casi toda por el potable pitón derecho, a pesar de llevar la
cara a media altura. Por el izquierdo le tragó las dudas del animal y le sopló
de uno en uno, varios naturales muy mandones. El murciano se expresó con el sabor de la madurez en una faena para
aficionados exigentes.
Muy Importante con un toro manejable que miró y se
enteraron muy pocos del tendido. Un mete y saca le quitó el futurible apéndice.

Dos largas cambiadas y ramillete de verónicas muy dormidas. Álvarez se expresó con sello en el
saludo al tercero. Un toro bien hecho, recogido y de preciosa estampa, que
resultó manejable en conjunto y que sacó nobleza y humillación además de gran fijeza
en la muleta aunque justo de raza. Alberto comenzó con el pase de las flores y una trabada tanda a diestras.
Posteriormente fue cogiendo el aire a la entregada embestida y lo llevó
embebido con el trazo en línea. Este hecho lo agradeció el toro e imprimió
largura a cada muletazo. Torero de envergadura
con la planta erguida que realizó una faena de interés con buenas formas
clásicas.
Hubo ligazón por el pitón derecho y lo mencionado al natural,
largura y profundidad. Pinchazo, estocada y dos descabellos esfumaron la
posible oreja. Se llevó un tremendo susto al perderle la cara al toro con el
descabello.

El inicio capotero al sexto fue un calco del tercero con largas
cambias en el tercio y bien a la verónica. Astado bravo en el caballo al que acudió
de largo y pronto. Brindó a Simón Casasy Nacho Lloret. Alberto comenzó por abajo genuflexo, con mando, empujando al toro
para ‘alante’. Un astado que cambió en el último tercio y que fue muy distinto
en comportamiento a los primeros. En este, salía distraído de cada muletazo con
la cara arriba y queriendo irse a tablas. Álvarezbuscó retenerlo tapándole la cara y de
paso ligar a derechas. Alberto volvió a mostrar buenas formas en su toreo 
pero faltó mayor conjunción y transmisión. Estuvo muy por encima del
cierraplaza que después de lo visto fue un mentiroso en el peto.

Bonitas verónicas de Torres al escurrido segundo. Un toro que metió muy bien la cara en el percal del
aragonés. Tras una decorosa lidia y notable tercio de banderillas, destacaron los pares de Marco Leal que
saludó montera en mano.
Pero lo más bello de la lidia al primero de Torres fue el precioso quite de Alberto Álvarez por ‘Caleserinas engarzadas con
Criolinas’ otros le llaman ‘Gallosinas’
. Ricardo brindó al respetable en los medios y tras la tanda inicial
Torres se lo quitó de encima. El de la
Quinta hizo un par de extraños y el diestro local cogió por la calle del medio
gesticulando
que «no tiene ni uno» bajonazo y bronca.

El quinto fue otro bello ejemplar, un cárdeno girón con las puntas
hacia arriba. Torres amarró un
cortito pero bien ejecutado saludo. El segundo del lote de Ricardo tuvo mucha toreabilidad. Torres lo muleteó principalmente por el pitón izquierdo con tandas
largas pero carentes de transmisión. Por el derecho, la misma tónica. Faena plana del diestro local sin mayores. Lo mejor la estocada arriba. Ovación
al toro y silencio para Ricardo Torres.

 

FICHA DEL FESTEJO

Plaza de
toros de La Misericordia. Segunda de la Feria del Pilar. Corrida de toros.

Entrada:
Media plaza.

Seis toros
de La Quinta. Desiguales de presentación, complicada y justa de raza. Destacó el buen quinto por su alta toreabilidad. 

Rafael
Rubio ‘Rafaelillo’,
ovación y silencio.

Ricardo
Torres,
bronca y silencio.

Alberto
Álvarez,
ovación y ovación tras aviso.

Cuadrillas:Saludó montera en mano en el segundo de la tarde Marco
Leal.

 

FOTOGALERÍA:
@TOROSZARAGOZA