JAVIER FERNÁNDEZ-CABALLERO
El empresario José
Ignacio Cascón ya vela armas para el 2017. La temporada pasada ha sido la de la
consolidación de sus plazas a través de la apuesta joven; la siguiente, seguro,
será la de la cumbre con tres auténticos milagros llamados Ledesma, Guijuelo y
Béjar. Tres cosos gestionados por Cascón que, con diferente personalidad, saben
aunar público en sus fechas clave para que la Fiesta siga viva en el campo charro.
Además de apoderado, sobre las manos jóvenes del Cascón empresario impera el
alma de aficionado que es la que lo mueve a echar el resto cada vez que
organiza un festejo. Esto cuenta.
En líneas generales,
¿qué balance haces del 2016? Los empresarios con los que hemos hablado nos
cuentan que se ha notado el aumento de público en las plazas, ¿lo has visto
así?
Hago un buen balance. A la gente cuando se le proponen
festejos interesantes y novedosos responde.
¿Se ha notado en tus
tres plazas la temporada del cambio en cuanto a la irrupción de jóvenes valores
ya consolidados en el escalafón? ¿Lo ha entendido el público?
Sí, se ha notado. Sobre todo donde más se notó fue a
principios de temporada en Ledesma. Lo que notas en ese cambio es que no tienes
que hacer un cartel rematado con las máximas figuras y que con estos toreros
nuevos tiene el mismo interés. Todo se ratificó en Guijuelo en el cartel con
Juan del Álamo, Garrido y Roca Rey con una plaza llena. Los toreros nuevos han
tirado del carro sin necesitar a las máximas figuras en estas plazas.
Empezando por
Ledesma, ¿qué te deja esa plaza? La gente va a los toros, pero de cara al
futuro, ¿qué te planteas?
Ledesma es una plaza que tiene 3400 localidades, y en el
pueblo viven habitualmente alrededor de 2000 personas, por lo que es complicado
ver la plaza casi llena como este año. Intentamos atraer al público de fuera,
para que visite la zona medieval del municipio y luego vaya a los toros. Es una
Feria a la que acude mucha gente de la provincia de Salamanca y de otras provincias.
Dos corridas, una de
rejones y una novillada sin picadores en Guijuelo. Una auténtica gloria en
pleno agosto.
Este año hubo dos corridas de toros, una de rejones y una
novillada sin picadores y se seguirá apostando por hacer una Feria fuerte. Cada
año se van rematando más los carteles, van subiendo los abonados y creo que hay
que seguir esa línea ascendente intentando combinar toreros nuevos con interés
con algunas figuras. Me gustaría llevar a las máximas figuras, pero si hay toreros
nuevos que llevan gente bienvenidos sean.
No es tontería el
número de festejos del abono: supera incluso a algunas capitales de provincia.
Efectivamente, es una Feria con más festejos que algunas
capitales de provincia: dos corridas de toros, una corrida de rejones y una
novillada sin picadores, además de los festejos populares. Vamos a seguir la línea
ascendente, cada año incluyendo nombres de toreros de mayor caché y ya se está
consolidando como una de las Ferias de agosto de las que se va hablando más y
más.
Además el apoyo
institucional es clave en el desarrollo de la Feria, ¿no?
Totalmente. El Ayuntamiento tanto en Ledesma, como en
Guijuelo y Béjar está volcado con el toreo. Ven que tienen unos resultados
buenos a nivel de calle y por eso siguen apostando. Los restaurantes y las
tiendas se llenan gracias al toreo, se ve movimiento de gente y eso lo valoran.
¿Cuántos abonados
tiene Guijuelo?
Cerca de 1000 abonados a la Feria. Guijuelo está
consolidado, sólo le falta un pequeño empujón de toreros de primera línea que
poco a poco lo irá teniendo. Muy poca gente de fuera se acercaba a Guijuelo a
los toros, y ahora van a probar el buen jamón y luego van a la plaza.
En Béjar, en «La
Ancianita”, un solo cartel pero un cartel fuerte para una localidad pequeña.
Béjar es distinto, va más despacio que las otras dos. Es tan
sólo un día al año pero es un día muy
bueno; es el día de la Virgen en esa plaza tan bonita. Queremos consolidarlo
como una fecha especial. Padilla tiene un gran tirón popular, que da la cara y
se entrega allá donde va. La gente de Béjar le agradeció el esfuerzo. Fortes en
Salamanca es un torero muy conocido, que hace muchísimo campo, que tiene muchos
amigos y lo conoce todo el mundo. Juan Leal también está pasando temporadas por
aquí, es un torero interesante que terminó indultando un extraordinario toro de
Vellosino, hierro que me ha dado siempre un resultado óptimo.
¿Con qué momento te
quedas en esta temporada en tus plazas?
Me quedo con el buen ambiente que he vivido en todas. Cada
una ha tenido su corte: un ambientazo en Ledesma con 2000 personas de fuera en
los toros, ver la corrida de las doce orejas de Guijuelo y ver el indulto de
ese toro de Vellosino que para mí ha sido algo especial, en una ganadería amiga
mía y en una plaza tan emblemática como esa. Me quedo con el mal sabor de boca
de no haber podido poner por muy poco el No Hay Billetes en algunas de mis
plazas.
Le estamos haciendo
la misma pregunta a los demás empresarios: ¿crees que una entidad como la
Fundación Toro de Lidia debería actuar de forma rápida contactando con la Administración
para renegociar los costes base de una corrida? Especialmente a las plazas más
pequeñas se les hace imposible rentabilizar los festejos…
Hay que ver de nuevo todos los costes. Son los
administrativos, los de los participantes… cuando un empresario se esfuerza en
que la gente vaya a la plaza, hace todo lo posible y la gente no responde, hay
que revisar todo. Los costes son tremendamente altos para organizar festejos y
las taquillas, aun trabajando mucho, no consiguen subsanar esos gastos… y a
parte de la taquilla, ¿qué empresas invierten en tauromaquia ahora mismo? Si
invierten, lo hacen en un poco de publicidad mínima. Hay que revisar todo en
general, ver cada plaza, ver cada circunstancia y apoyar todos los lugares.
Cada plaza es un mundo y en cada plaza hay que buscar la fórmula para que se
trabajen dignos y todos se lleven lo suyo.
Siendo claros, ¿qué
costes externos habría que hacer presión para revisar y que costes internos
habría que revistar también?
Todos. A todo el mundo nos cuesta bajar cachés y queremos
ganar cuanto más mejor, pero todos tenemos que revistar. No podemos dejar que
se cierren plazas porque no sean rentables. Al fin y al cabo son empresas y hay
que mantener las aunque sea por lo mínimo y, gracias a nuestra unión, tienen
que ser rentables. Empezando pro mí, revisaría todos los costes en general.
