ENTREVISTA

Jorge Arellano: “El torero que sólo torea tiene que acabar: debe acercarse al público haciendo suyos los proyectos empresariales”


martes 6 diciembre, 2016

En nuestro repaso empresarial con los nombres más destacados de la temporada, hoy Jorge Arellano nos acerca la realidad de su campaña 2016: las plazas de Leganés o Pozuelo recaen en sus manos

En nuestro repaso empresarial con los nombres más destacados de la temporada, hoy Jorge Arellano nos acerca la realidad de su campaña 2016: las plazas de Leganés o Pozuelo recaen en sus manos

JAVIER FERNÁNDEZ-CABALLERO /
FOTOGALERÍA: LUIS SÁNCHEZ OLMEDO

En nuestro repaso
empresarial con los nombres más destacados de la temporada, hoy Jorge Arellano
nos acerca la realidad de su campaña 2016. Levantó la Cubierta de Leganés hace
dos temporadas, la consolidó durante la que ahora acaba y tiene por reto
elevarla a la cumbre de los cosos de Madrid en 2017. Sabe y siente el toreo en
sus venas, aunque ya no sea en el ruedo, pero trabaja por que su pueblo y las
plazas que gestiona lleven su sello.

¿Has notado, Jorge,
un aumento de público esta temporada en las plazas como otros empresarios han
experimentado?

Personalmente en las plazas que he gestionado estoy
satisfecho y contento por los resultados, sobre todo artísticamente y en la
gran mayoría de ellos también de asistencia de gente. Sí ha habido un poco
repunte de aficionados, sobre todo si hablamos de festejos con cierto interés.

Empezando por la
plaza madre de las que gestionas, Leganés, ¿qué balance haces del coso? ¿Cómo
son los planteamientos de futuro con él?

En Leganés estoy muy contento. Si echamos la memoria atrás,
todos sabemos dónde estaba y dónde está ahora mismo. La corrida de abril fue
todo un éxito, tanto artísticamente como de asistencia. En agosto bajó un poco
la asistencia, pero son unas fechas muy delicadas, porque son fiestas pero
coincide con la segunda quincena de agosto y las vacaciones. Esto nos sirve para
ir cogiéndole el aire a la plaza de toros. Desde el año pasado que nos hicimos
cargo de la plaza, hoy se puede hablar de La Cubierta de Leganés en cualquier
sitio porque la gente sabe lo que se está haciendo. Este año en el que entramos
será el año definitivo de su recuperación.

En cuanto a ese
resultado de público tanto en abril como en agosto, ¿qué conclusiones sacas para
potenciar más un festejo u otro?

Agosto es un festejo que, siendo fiestas, debe funcionar
mejor que este año. El año pasado funcionó muchísimo más. Este año fue en día
de diario y eso afectó a que hubiera un poquito menos de gente. Estoy muy
contento porque hemos subido muchísimo de dos años a esta parte. En abril no
estaba consagrada la plaza, fue una apuesta muy grande y estoy contento. Era un
cartel con mucha inversión y todo salió muy bien gracias a los toreros que
participaron en la promoción previa. Los toreros tienen que sentirse
identificados con los proyectos, porque ellos son los protagonistas y ellos son
los que va a ver la gente. No va a ver a los empresarios. En este caso, el
resultado tan bueno de abril fue también gracias a la participación previa de
los toreros.

 

Una de las cosas a
las que no está acostumbrado el mundo del toro es a aprovechar ese tirón social
que tienen ciertos toreros para llevar gente a la plaza. Tú lo hiciste y te
salió cara.

Mi única intención fue la de hacer más cercana la corrida de
toros al público, y para eso usé todo lo que más cerca posible de la sociedad
está. Hicimos una presentación en un centro comercial, que es donde hoy en día
está la gente, y tuvo una repercusión máxima. Tenemos que acercar nuestro
espectáculo a la gente para que no le resulte lejano. Años atrás la gente iba a
los toros por inercia, pero ahora mismo y aunque sigue teniendo interés,
contamos con mucha competencia en el ocio. Hay que intentar llegar lo más fácil
posible a la gente, por lo que usamos lo que está en nuestras manos para hacer
una promoción del toreo lo más amplia posible. El torero que sólo torea tiene que
acabarse: ahora el toreo debe acercarse al público para hacer los proyectos de
los empresarios suyos propios.

¿Se repetirá la corrida
de abril, no?

Mi intención es consagrar ese festejo porque creo que debe
ser así. La cubierta siempre se ha caracterizado por esos festejos de invierno
y primavera, y después de los resultados de este año hay que seguir luchando
para consagrar tanto la fecha como al cubierta.

¿Qué otros cosos has
gestionado esta temporada?

Hemos gestionado seis plazas de toros este año, la más relevante
que hemos cogido ha sido Pozuelo de Alarcón por vez primera. Era una plaza que
estaba venida abajo.

La Comunidad de
Madrid ha sufrido, con la llegada de la nueva política, un resquebrajo brutal
en algunas de sus plazas señeras. Getafe, donde el consistorio no se aclara con
la constructora para reabrir el coso, o Móstoles, donde el Ayuntamiento no
quiere dar toros, son algunos ejemplos.

La verdad es que políticamente hemos pasado una situación
complicada. Nos estamos encontrando muchísimos inconvenientes, pero en el caso
de Leganés no es así, son todo facilidades para que los festejos tengan la
mayor aceptación posible, pero sí es cierto que políticamente estamos muy
atacados. Poco a poco se irá pasando, porque los ejemplos son claros de que los
toros interesan a la gente. Los políticos no pueden ser ciegos ante tan
evidente imagen. Ese fondo antitaurino político se irá apagando solo por
sentido común, y el buen político debe escuchar al pueblo y si una parte de
éste grande quiere toros, habrá que dárselos. En Getafe por un problema de
estructura de la plaza llevamos años sin dar toros: hay una discrepancia entre
la constructora y el Ayuntamiento, pero en medio de ese tejemaneje no hay
toros. Creo que este año que viene, gracias a la estabilidad política a nivel
nacional, muchos pueblos que han estado inestables van a volver a recuperar su
base taurina.

En la faceta del apoderamiento,
llevas la carrera de Guillermo Valencia, ¿qué resaltas de su temporada?

Nos hicimos cargo de él el año pasado. Estoy contento,
porque han tenido una grandísima impresión sus actuaciones. En Frandia toreó
con muchísimo ambiente y, en principio, estamos contentos. Si no surge ningún
cambio toreará en la Santamaría de Bogotá. Siempre que haya novilleros con
condiciones para esta profesión y que la respeten, yo personal y profesionalmente
estaré encantado de ayudarles. Es muy necesario recuperar toreros y sacar
jóvenes adelante.

¿Y el caso de Luis
Miguel Encabo? ¿Cómo ha sido su lucha en 2016?

Luis Miguel es un torero muy maduro, al que nadie va a
descubrir ahora mismo. Es muy clásico, muy puro, ha echado una temporada corta
pero interesante. Ha aumentado el tipo de festejos que torea, y eso se ve
mermado en los pueblos. Es un torero que quizá debería estar ocupando otra
posición, pero por las circunstancias no podemos caminar en grandes Ferias. Ha
hecho una temporada de nueve corridas entre España, Francia y América y siempre
deja huella de su personalidad y su buen concepto del toreo.