JAVIER FERNÁNDEZ-CABALLERO
El empresario Bernard
Marsella aguarda armas para la próxima campaña. En prácticamente un mes se
presentarán los carteles de la Feria de Istres, que un año más llevan sorpresa
implícita pero con la calidad siempre como bandera. Cuatro corridas de toros,
una novillada con caballos y una sin los del castoreño componen un serial que
se ha erigido, entre los coliseos de Nimes y Arles, como uno de los bastiones
creativos en la tauromaquia cruciales más allá de los Pirineos. Su empresario,
en pleno remate de las negociaciones, habla y cuenta qué ha sido y qué será del
serial en «El Palio” en 2016 y 2017.
Terminó la temporada
y estáis en plenas negociaciones para presentar, en apenas treinta días, la
Feria de Istres 2017, ¿qué balance hacéis de esta temporada y qué líneas
trazáis para la siguiente?
Este año ha sido un éxito más. Hemos festejado los 15 años
de Feria en una plaza nueva como es El Palio. Hemos apostado por cinco
espectáculos en la Feria y una novillada sin caballos en agosto. Cada tarde ha
tenido su éxito. Además, intentamos cada
vez superarnos a través de la calidad, la originalidad, la creatividad y ser
distintos de las otras plazas que nos rodean, como son las Ferias de Nimes y
Arles.
Conforme pasan los
meses tenemos la sensación de que lo que ocurrió aquella tarde en Istres con
Enrique Ponce va tomando más forma de histórico. Así lo ha calificado
posteriormente el propio torero.
De las tardes más emotivas de su vida. Mucha gente no tenía
fe en la corrida porque hacía mucho aire, y a los toreros artistas el aire
molesta mucho. Pero paró el aire con su personalidad y captó la atención de la afición
desde el primer momento. Fue una tarde para el recuerdo. Es una cosa que ni
siquiera se puede contar, se tiene que vivir. Lo del smoking ha tenido polémica,
pero es algo que hay que vivir en el momento. Muchos aficionados no
comprendieron la encerrona, pero no saben que no tenía necesidad Ponce de matar
esa corrida en solitario a las alturas de su carrera. Además, Istres era el
escenario ideal para abrir la plaza a otras culturas. Los aficionados estaban
emocionados al salir de la plaza de toros. Decían que habían tenido la misma
sensación que en la encerrona de José Tomás en Nimes. Y para los que estamos
trabajando ahí es importante. De un año a otro cosas así crean una presión y
responsabilidad más. Todo el mundo ha comprendido que hacemos una labor
importante para el futuro de la Feria.
La estructura ya está
definida de cara a la próxima temporada y habrá cambios en las fechas, ¿cómo
serán?
Este año es un año distinto, porque hay elecciones
presidenciales y legislativas en las fechas de la Feria. Por eso, el alcalde ha
preferido retrasar una semana la Feria para no darla durante las elecciones.
Será el 23, 24 y 25 de junio y estamos confeccionando los carteles ahora mismo,
queda aún un mes de negociaciones hasta que anunciemos la Feria en el mes de
enero. A partir de ahí seguiremos trabajando, abriremos la taquilla e
intentaremos llenar esa plaza, que no es fácil hacerlo todas las tardes porque
hay que buscar el apoyo de las empresas privadas. Ahora mismo hay una crisis
económica más fuerte que los otros años, hay todavía miedo a los atentados y no
hay que equivocarse. Se da uno cuenta que las masas se desplazan cuando
realmente hay acontecimientos fuertes y distintos. No se puede tampoco inventar
lo que no existe, pero sí ir con la calidad por delante. Eso es lo que estamos
procurando hacer.
Simón Casas al
terminar la Feria de la Vendimia de Nimes dijo que el público aún no tenía
absoluta confianza tras los atentados como para acudir a los espectáculos. Eso
mermó el abono en el Coliseo, ¿realmente existe ese miedo social aún entre la
población francesa?
Pasa en toda Francia, pero a nosotros la Feria nos cogió
antes de los atentados de Niza. Las Ferias posteriores como Béziers, Arles o
Nimes lo han acusado porque la gente estaba asustada. El país no sabía por
dónde iba a salir el tema. Ahora las elecciones influirán muchísimo para el
porvenir de la Fiesta también.
¿Cómo puede ir
programando un aficionado su viaje a Istres la próxima campaña? ¿Qué
facilidades turísticas tiene la ciudad?
El aeropuerto de Marsella está a 35 minutos de Istres, la
autovía también queda cerca. Se puede ver toda la información en la página web
de la ciudad de Istres, están también las posibilidades de comprar las entradas
por internet y se ponen un montón de facilidades. Istres sigue siendo un pueblo
grande, con 45.000 habitantes, y un centro con restaurantes magnífico. Es una
ciudad bella. Muchos aficionados sólo van a la plaza de toros y se pierden la
grandeza de esta ciudad.
¿Se presentará la Feria
en Cataluña como otros años?
Esperemos que sí. Hace unos días acudimos a la reunión de
los aficionados catalanes tras el fallo del Constitucional. Trabaja conmigo el
matador César Pérez, de Barcelona, y estamos unidos con la afición catalana.
FOTOGALERÍA Y VÍDEO: EMILIO MÉNDEZ
