NATALIA GIL
D. Paco Medina, sabedor de la situación de la
Fiesta, ha tenido que reducir su ganadería por los pocos festejos que se
celebran. Aun así, él no pierda la ilusión y afirma que, después de crear El
Ventorrillo, está consiguiendo formar otra ganadería importante a sus 82 años. Está
seguro que así lo va a demostrar en Madrid.
Tras la campaña invernal, ¿cómo se encuentran las
camadas?
Casi todas están
reducidas, al menos así lo creo yo. Ha mermado todo bastante porque se da menos
espectáculo. Me atrevería a decir que, incluso, un 50% en todas las ganaderías.
Hay menos necesidades y los ganaderos tenemos que reducir porque no se dan
salida a tantas cabezas.
En la temporada pasada se lidiaron un total de 8
festejos entre los que había corridas de toros y novilladas, ¿qué balance saca
su ganadero de todas ellas?
El balance fue
bueno pero el dar tan pocos festejos te limita mucho para percibir bien a tus
toros. Para ser buen ganadero hay que lidiar porque son muchas pruebas las que
se han de realizar. Las novilladas se están reduciendo mucho y las corridas de
toros tienen muchas limitaciones, empezando por los precios que tienen.
¿Cuál fue el toro o el novillo que el año pasado
mejor representó a la ganadería?
Hubo dos toros
en San Isidro buenísimos. Lo que tengo que decir a lo mejor a alguien no le va
a sentar bien pero fueron de los toros importantes que hubo en la feria. Depende
de las manos y de muchas cosas. Uno le tocó a Alberto Aguilar y el otro a
Joselito Adame. Aun así, creo que la corrida fue bastante aceptable siempre
sabiendo que el toro de Madrid es diferente y que debe embestir con raza y que
como no haya motor no vale.
¿Cuál es la cualidad que D. Paco Medina destacaría
del toro que está criando?
Yo fui el que
creó una de las mejores ganaderías de España que fue El Ventorrillo y creo que
el lunes lo voy a demostrar que la segunda ganadería ya la tengo en la mano. Desde
luego que hasta que no se lidia no se puede saber a ciencia cierta pero me
arriesgo a decir, por primera vez, que tengo una ganadería buenísima formada. Me
ha costado tiempo porque cada prueba que se hace dura cinco años. Estoy seguro
que como mínimo cuatro novillos van a embestir en Madrid. A veces hemos tentado
cinco vacas y a las cinco las he tenido que aprobar pero, además, como a mí me
gustan que embistan las vacas y los toros: que humillen, que se desplacen y que
quieran morder la muleta en el último momento del muletazo. Y eso lo tengo
logrado.
El año pasado El Montecillo lidió una corrida de
toros en San Isidro y, este año es una novillada, ¿a qué se debe ese cambio?
Yo he estado
casi anunciado en San Isidro con la corrida de toros pero se fastidiaron tres
toros y la empresa si no tienes, como mínimo nueve o diez toros, no te anuncia
en el abono. Probablemente se lidiará el 15 de agosto. Ellos no han querido
correr el riesgo de anunciarme en abono por si le pasaba algo más a alguno de
mis toros. Creí pero iba a lidiar corrida de toros y novillada pero ante
problema no se ha podido. Para mí no es lo mismo, pero de cualquier manera voy
a lidiar en Madrid.
Inaugura la temporada con una cita clave en la vida
de cualquier ganadero como es Madrid, ¿qué espera de esa tarde?
Llevo una
novillada preciosa y se va a comprobar. Es una corridita de toros en plaza
de segunda pero en Madrid hay que ir
así. Va a poner las cosas en su sitio, este año ya se merece estar esta
ganadería en el puesto por el que estoy luchando.
El encierro lo lidiarán los novilleros Filiberto,
Juan de Castilla y Luis David Adame, ¿qué opina D. Paco Media de estos novilleros?
En Luis David
Adame viene mucho a casa, tengo una fe enorme en él. Creo que es muy capaz, que
va a triunfar y espero que la novillada le ayude. Es muy buen torero. Los otros
dos los conozco menos.
¿Cómo ve el futuro de El Montecillo?
Mi nieto seguirá
con la ganadería. Coincidimos mucho en la forma de pensar. En ocasiones le
pregunto qué nota le daría la vaca en el tentadero y casi siempre puntuamos
igual. Espero que la continuidad sea para mejor.
