ARANJUEZ

Aranjuez vuelve a tener vida


lunes 30 mayo, 2016

Los dos matadores que torearon un mano a mano en el coso madrileño salieron a hombros ante más de tres cuartos de plaza. Morante cortó dos orejas al quinto y El Juli dos al cuarto y una al sexto.

Los dos matadores que torearon un mano a mano en el coso madrileño salieron a hombros ante más de tres cuartos de plaza. Morante cortó dos orejas al quinto y El Juli dos al cuarto y una al sexto.

IGNACIO
RUBIO

José
Antonio «Morante de la Puebla” –que reaparecía- y Julián López «El Juli” se
batían esta tarde en duelo en la plaza de toros de Aranjuez. Volvía a recuperar
esplendor la corrida de San Fernando en la ciudad madrileña para la cual un
encierro de Victoriano del Río estaba preparado.

Salió el primero de la tarde y Morante se destapó con seis
verónicas y dos enganches en un quite a medias. No se empleó ante el flojo
astado que se perdió en tres series a derechas sin gran calado. Frío, sin
emplearse ni toro ni torero que no probó a zurdas y a espadas falló, igual que
con el descabello. Sonando pitos y palmas hubo una división en su labor.

Buen saludo de capote a la verónica de El Juli al de
Victoriano del Río. Tras un buen puyazo, el quite tuvo su mejor versión en la
larga a una mano de remate. Comenzó la faena de muleta brindando al público. Resultó
soso, sin raza y sin clase el segundo, que cantó tras la serie con la derecha
que prometía todo pero que fue a menos al natural. El Juli quiso justificarse
sin encontrar respuesta ni en el público, ni en la música que arrancó y mandó
pararla el diestro. Pinchó antes de la estocada y fue silenciado.

El de Alcurrucén, descastado y flojo, se le coló en el tercio a
la verónica a Morante. Así como al ponerlo en suerte al caballo. La faena
comenzó por bajo, con pellizco, la primera serie en redondo para diluirse como
un azucarillo. Morante estuvo delante con aparente disposición y poco enemigo
para lucirse. De nuevo pinchazo antes de la estocada y fallo con el descabello.
Leves palmas de fondo, aún se le sigue esperando al de la Puebla del Río.

Dos orejas con fuerza para El Juli ante un animal no exento
de complicaciones. El de Velilla se la jugó ante la petición del tendido en
desacuerdo con el inicio, Julián miró y se apretó por ambos pitones con trazo y
mando. Muy ajustados los embroques y nada fáciles, una serie al natural muy
baja y en el final por luquesinas terminó de encandilar al respetable. La
estocada hizo el resto. El Juli paseó con júbilo el doble trofeo.

Fulgurante salida de Morante para saludar al quinto con un farol
de recibo y una media abelmontada seguido de dos verónicas de ensueño con voltereta
para el de Garcigrande. Recibió un puyacito de justificación. El quite a la
verónica fue lento y muy bueno. El astado marcaba unas hechuras y una nobleza
exquisita, con su excelsa embestida el de La Puebla lo pudo torear de ensueño.
Faltarían adjetivos para enjuiciar el duendo que se esperó hasta el quinto
donde se paró el reloj en los naturales y en esa forma de romperse la figura,
en la propia improvisación. Hubo series impecables con otras rotas por
completo, los ayudados y los faroles. El público estaba entregado y el torero
dejó su fiebre en el ruedo. La estocada hizo el resto y paseó las dos orejas
del toro que brindó a D. José Bengamin.

 

Difícil que El Juli se dejase ganar la partida; se la jugó,
literalmente, entre los pitones consiguiendo series de gran calado y dominio. Poderoso
de tirar del animal muy por bajo como pocos toreros pueden hacer, brilló como
tantas tardes ante enemigos. Los circulares interminables y los desplantes,
marca de la casa, así como la estocada volcándose. Sonó el aviso antes del
descabello y paseó un trofeo.

FICHA DEL FESTEJO

Plaza
de toros de Aranjuez, Madrid. Tradicional corrida de toros de San Fernando.

Seis
toros de Victoriano del Río, Alcurrucén y Garcigrande, premiado éste en quinto lugar con la vuelta al ruedo.

José Antonio «Morante de la Puebla”, pitos/palmas, leves palmas y dos orejas. 

Julián López «El Juli”, silencio, dos orejas y oreja.