ENTREVISTA

Venegas: “¿El mayor miedo? Que como no pase nada no tengo otra oportunidad…”


martes 31 mayo, 2016

Hará el jiennense el paseíllo esta tarde en Madrid junto a Sánchez Vara y Alberto Aguilar con la corrida de Saltillo

Hará el jiennense el paseíllo esta tarde en Madrid junto a Sánchez Vara y Alberto Aguilar con la corrida de Saltillo

JAVIER
FERNÁNDEZ-CABALLERO / FOTOGALERÍA: LUIS SÁNCHEZ OLMEDO

José
Carlos Venegas hará el paseíllo esta tarde en Madrid junto a Sánchez Vara y
Alberto Aguilar con la corrida de Saltillo. El pasado mes de septiembre logró
cortar un apéndice en Madrid a un toro de Moreno Silva, de lo que asegura que
«creo que era una prueba difícil de la que salí contento porque, casi
sin torear y enfrentándose a ese tipo de encastes, es para salir contento.
Salió un toro para quitarme de en medio y creo que estuve a la altura de las
circunstancias. Cortar una oreja con fuerza y disfrutarla no es fácil. Tuve ese
momento, lo viví y estoy contento”.
Hablamos con el torero.

¿Cómo te encuentras física y psicológicamente
para esta cita?

Después
del año pasado, hemos intentado entrar en San Isidro, algo que no era fácil. La
corrida era la que nos han ofrecido. No hemos podido movernos ni para un lado
ni para otro, y la verdad que voy con mucha ilusión, con muchas ganas porque me
siento un privilegiado de verme anunciado en esa Feria tan importante. Llevo a
cabo una preparación muy fuerte, yendo mucho al campo, entrenando mucho.
Psicológicamente pienso que estamos mentalizados todo el año y es lo que hay,
esto es duro, hay que luchar y entrenar mucho y estar preparados para que, si
rompe el toro, aprovecharlo.

¿Cómo embistió el año pasado el encierro de
Saltillo y cómo recuerdas aquel festejo en el mes de septiembre?

Si te
soy sincero, maté el año pasado dos corridas de Saltillo, una en Cenicientos y
otra en Madrid. La de Cenicientos no la recuerdo mala, sino peor, y la de
Madrid la recuerdo con tres toros que, con sus cosas, se dejaron. Se podía
estar delante de ellos. Mi primer toro se echó, y aunque no tenía mala
condición, no sirvió. Luego mi segundo toro, otro de Marco Antonio Gómez y otro
de Sánchez Vara fueron manejables. Si pienso en ello, tengo esperanzas, si
pienso en la de Cenicientos no la tengo. La embestida de mi toro fue con
transmisión, mucha casta a pesar de que era bruto. Venía con todo, a 100 por
hora y la faena se basó en la mano derecha. Ojalá y la corrida de Saltillo de
hoy se pareciera a la de hace unos meses.

Un triunfo importantísimo en Jaén remató tu
año con el encierro de Torrestrella, ¿cómo fue aquella tarde?

Esa fue
una tarde muy bonita. Torear en mi tierra me da vida, me hace mucha ilusión y
me transmite a la vez presión y responsabilidad .Jaén es una plaza importante,
que me ha dado muchos triunfos. Me tocaron dos toros buenos de Torrestrella, y
cuando llega final de temporada los toreros estamos más rodados, con más tablas
y lo disfruté mucho. Además ver a la gente de tu tierra contigo es algo que
disfrutas mucho.

Los días previos a esta corrida, ¿cómo son?
Y, ¿qué puede ganar o perder José Carlos Venegas en esta cita de San Isidro?

La
verdad que he dicho siempre que Madrid da y quita mucho. No tengo nada
prácticamente, sólo una corrida en Céret. Psicológicamente para mí significa
mucho porque tiene que pasar algo. Si no pasa nada, se olvidan de ti, no te
quieren volver a poner, pasan los años y no ves tu nombre… ese es el miedo y la
presión que llevamos los toreros de mi tipo. Ese es el miedo. Ni el toro, ni la
ganadería ni la plaza, sino que te quiten del medio. Si salen las cosas bien
hay mucho que ganar porque te llaman de los sitios y empiezan a rodar. Si no
pasa nada, te vas al traste inmediatamente, y ese es el miedo que llevo. Quiero
ser torero, sé las cualidades que tengo, sé dónde puedo llegar y que no se nos
pueda dar la oportunidad por una tarde que me juzguen es doloroso, por eso no
se nos puede escapar.

¿Cómo ha sido tu preparación y la previa a
esta corrida de Saltillo?

Vivo en
el campo, en una ganadería de Antonio García Vázquez. He estado estos días
prácticamente encerrado en el campo, matando toros a puerta cerrada. He toreado
muchas vacas, entrenando mucho por la mañana y por la tarde. Estos días los he
pasado en el campo, con la mentalización lógica.