EL DETALLE

Historia de Manzanares de una tarde para la memoria


miércoles 1 junio, 2016

Así vio, tal y como muestra la ilustración, nuestro compañero Juan Iranzo la corrida de Victoriano del Río esta tarde en Madrid

Así vio, tal y como muestra la ilustración, nuestro compañero Juan Iranzo la corrida de Victoriano del Río esta tarde en Madrid

Así vio, tal y como muestra la ilustración, nuestro compañero Juan Iranzo la corrida de Victoriano del Río esta tarde en Madrid.  

 

El quinto toro llevaba
por nombre «Dalia”, y lo cuajó de capote José María Manzanares
recibiéndolo con un ramillete de templadísimas verónicas. Se le arrancó con
prontitud y desde el mismo centro del anillo a Chocolate, que rectificó la
primera vara. Por chicuelinas a pies juntos quitó con las manos muy bajas, en
un toreo capotero cantado pronto por la plaza, marcando el vuelo con muchísimo
gusto y mucho temple. Brindó el toro al público y para enmarcar fue el inicio de
faena, con mucha enjundia destacando los trincherazos. Se le coló en la primera
tanda por el derecho el de Victoriano del Río para proseguir por esa mano con
un espléndido pase de pecho en dos tiempos. Al natural también lo llevó
larguísimo, con el toro embistiendo y humillando, haciendo el avión para que
José María comprendiese su tranco por ese lado. Lo pisó en el epílogo
muleteril, arrancándole la zapatilla en un momento de angustia saldado con
fortuna porque no hirió el de Victoriano del Río al torero alicantino. Mató de
estocada recibiendo y cortó dos orejas pidiendo el rabo.