SAN FERMÍN

Cuarto encierro rápido y accidentado con los Pedraza de Yeltes


domingo 10 julio, 2016

Tres mozos han tenido que ser trasladados al hospital con traumatismos en una carrera muy masificada que ha durado dos minutos y 29 segundos

Tres mozos han tenido que ser trasladados al hospital con traumatismos en una carrera muy masificada que ha durado dos minutos y 29 segundos

 SILVIA QUÍLEZ / RTVE

El cuarto encierro de San Fermín 2016 ha sido muy rápido y accidentado, con muchas caídas de los toros de Pedraza de Yeltes, que se ha estrenado este año en Pamplona, y mozos golpeados y atropellados por los animales en una carrera masificada por coincidir en fin de semana.

Pese a lo accidentado del encierro, solo tres mozos han tenido que ser trasladados al Complejo Hospitalario de Navarra con traumatismos, según datos provisionales ofrecidos por fuentes hospitalarias.

Los astados han salido muy agrupados y veloces, lanzando derrotes en la cuesta de Santo Domingo, en seguida han adelantado a los cabestros y han corrido así hasta que la manada se ha abierto a lo largo de la calle Estafeta, aunque ha seguido muy hermanada a lo largo de toda la carrera.

 

La rapidez de los morlacos y la masificación han propiciado golpes a los mozos que se encontraban a lo largo del vallado, aunque ninguno de los animales se ha encelado con los corredores, por lo que el encierro ha sido limpio.

Los Pedraza de Yeltes se estrenan en San Fermín

De hecho el primero de los animales ha entrado en la plaza a los dos minutos y 15 segundos, aunque finalmente el encierro se ha prolongado hasta que el último de los astados ha entrado en los chiqueros, a los 2 minutos y 29 segundos.

El comportamiento de la ganadería Pedraza de Yeltes, de Salamanca, era una incógnita en San Fermín, puesto que nunca habían participado en estos encierros.

Los toros de la ganadería salmantina serán lidiados por la tarde por los espadas Curro Díaz, Iván Fandiño y Juan del Álamo.

El fallecimiento del torero Víctor Barrio, este sábado por la tarde, al recibir una cornada en la plaza de Teruel, que todo el mundo taurino ha vivido con consternación, ha marcado la celebración de este encierro.