MADRID

Ovaciones para Alcalde y un herido Terrón con un grandioso encierro de Peña


domingo 17 julio, 2016

Hasta tres animales y medio con posibilidades del hierro toledano se lidiaron para que Mario Alcalde fuese ovacionado, Luis Manuel Terrón herido y Alejandro Conquero silenciado

Hasta tres animales y medio con posibilidades del hierro toledano se lidiaron para que Mario Alcalde fuese ovacionado, Luis Manuel Terrón herido y Alejandro Conquero silenciado

MARCO A.
HIERRO / FOTOGALERÍA: LUIS SÁNCHEZ OLMEDO

Una
novillada de Fernando Peña era la materia prima ganadera este domingo en la
plaza de toros de Madrid para el festejo novilleril del ecuador del mes de
julio. En el cartel, Mario Alcalde, Luis Manuel Terrón y Alejandro Conquero.

Al primero de Fernando Peña le faltó humillación en el saludo animoso de capa de Mario Alcalde, pero repitió las arrancadas. Se dejó pegar en el penco y ya lo hizo mejor al salir de la primera vara. Por chicuelinas el quite de Alcalde para dejarlo largo en la segunda, en la que se arrancó con rectitud. Asiento tuvo el quite de Terrón por chicuelinas y tafalleras. Tuvo tranco y tuvo son el animal en la muleta, agradecido cada vez que llegaba el temple, pero no fue siempre. Académico en ocasiones Mario, fueron de tres y el de pecho las series en línea, sin apretar. Solo en naturales sueltos logró que llegase la conexión, con el novillo obedeciendo siempre a los vuelos. Pinchó y escuchó silencio. 
 
Humilló en el capote de Terrón el segundo, pero le faltó ritmo y fijeza para que pudiera estirarse el extremeño. Se fue quedando corto el animal en los primeros tercios y ya en el quite de Conquero se quiso quedar debajo. Mantuvo la condición en la muleta, trasteo que comenzó Terrón con un cambiado de escalofrío para conectar rápidamente, pero todo se fue diluyendo un poco al no acoplarse a la condición del animal y permitir los enganchones. Intentó sacar la muleta por debajo de la pala y asentarse en los embroques, pero le faltó pulso para alargar viajes. Entera la estocada, saludó una ovación. 
Más terciado era el tercero, que se desplazó con buen son y humilló con calidad en las verónicas que remató Conquero con una larga cambiada de rodillas. Fue extraordinario el novillo en la muleta. Fijeza, nobleza, humillación, clase, recorrido y duración, es el que te sueñas para que salga en Madrid. Pero Alejandro le dio compostura, verticalidad, livianía y acompañamiento, que resultó muy estético para la foto, pero faltó la profundidad y el recorrido largo. Voluntad, la tuvo toda el chaval, pero la ovación al novillo en el arrastre contrastó con el silencio para él tras la estocada.
Un hombre era el salpicado cuarto que le volvió ancas al capote de Mario Alcalde y, sin embargo, le echó la cara abajo y se fue detrás del de Alfredo Cervantes en excelente brega. Con genio llegó al penco en varas, empujando de mentira tras el topetazo y rehuyendo la pelea. Y, sin embargo, sacó movilidad, transmisión y calidad en la muleta para convertirse en el novillo de reventar Madrid. Y Alcalde le dio compostura, liviandad y hasta falta de estructura por momentos, cumpliendo los mejores momentos por un extraordinario pitón izquierdo que se fue sin cuajar, a pesar de la petición de oreja no concedida y la ovación saludada.
Al burraco que hizo quinto, un toro de cualquier plaza, lo bregó con brillantez por abajo Terrón, mejor que luego, al estirarse a la verónica. Salió huyendo del penco el utrero en la primera vara, que no tomó. Manso el animal, fue bueno el inicio por abajo de Terrón, que a la segunda tanda con la derecha se quedó descubierto en un abuso de confianza y resultó prendido, recibiendo el pitón en el muslo y siendo trasladado a la enfermería. Mario Alcalde se hizo cargo del animal sin darse coba.
Otro novillo serio cerró plaza, humillando el percal de Conquero con franqueza sin ritmo, queriendo salir suelto y saliendo definitivamente. Topón en el caballo, se puso bronco y protestón en la muleta sin que Conquero le acercase en la solución de problemas. Se lo quitó de en medio con brevedad y escuchó silencio. 

FICHA DEL
FESTEJO

Plaza de
toros de Las Ventas. Novillada con picadores estival. Un cuarto de plaza.

Seis
novillos de Fernando Peña, noble, con tranco y fijeza el primero, exigente, rebrincado y de viaje corto pero obediente el noble segundo, humillado, con clase, recorrido y fijeza el extraordinario tercero, aplaudido en el arrastre, de gran transmisión, humillación y fijeza el gran cuarto, manso pero humillado y embestidor el burraco quinto, bruto y protestón el manso sexto. 

Mario Alcalde, silencio, ovación y silencio en el que mató por Terrón. 

Luis Manuel Terrón, ovación y herido. 

Alejandro Conquero, silencio y silencio.