MONT DE MARSAN

Un triunfo, dos orejas y una extraordinaria novillada de Virgen María


sábado 23 julio, 2016

Andy Younes, pese a la espada, corta una oreja de cada utrero del gran encierro galo; una oreja pasearon Pablo Aguado y Jesús Enrique Colombo

Andy Younes, pese a la espada, corta una oreja de cada utrero del gran encierro galo; una oreja pasearon Pablo Aguado y Jesús Enrique Colombo

TEXTO Y FOTOGALERÍA: EMILIO MÉNDEZ

Andy Younes, Jesús Enrique Colombo y Pablo Aguado hacían el
paseíllo de forma nocturna en la Feria de la Magdalena de Mont de Marsan. Lo
hacían con un encierro de Virgen María como materia prima ganadera en una
apuesta de futuro en el serial galo.

Un gran novillo fue el primero de Virgen María, con transmisión en las cadenciosas verónicas de Pablo Aguado. Levantó al público de los asientos en varas el animal, de gran pelea. Tuvo mucho empaque y temple la faena de Aguado, que tuvo gusto al natural, sobre todo a pies juntos. La espada desprendida dejó el premio en una oreja. 

Muy dispuesto estuvo Colombo con el primero de su lote. Salió a por todas el venezolano, con un novillo bueno y bravo que empujó mucho y bien en el caballo. Quitó por chicuelinas Colombo, que protagonizó también un espectacular tercio de banderillas, con tres buenos pares. Tuvo empaque y muy buenos detalles, bajando la mano por ambos pitones en una buena faena que quedó emborronada por la guardia que le hizo la espada. Palmas. 

Bravura, transmisión y calidad tuvo el tercero de la noche, con el que Andy Younes inició encajado a la verónica una faena de mucho fuste. Dos veces acudió el animal con codicia al peto, antes del quite del galo por tafalleras que respondió por verónicas Pablo Aguado. Con tres péndulos puso el inicio a una obra muy completa y variada de muchos quilates, disfrutando mucho con la buena embestida del novillo, que también se llevó las palmas en el arrastre. El pinchazo previo a la estocada, sin embargo, dejó el premio en una oreja.

El cuarto se lastimó nada más salir, con una vuelta de campana que mermó su condición, aunque siguió siendo buena. Fue bravo en el caballo y muy interesante en la muleta, obligando a Pablo Aguado a sacar inteligencia y aplicar soluciones. Tuvo profundidad en los muletazos y mucha personalidad para hacer muy bien las cosas. Todo excepto matar. Muy mal con la espada, todo quedó en palmas.

La disposición y la entrega de Jesús Enrique Colombo fueron sus armas fundamentales ante el quinto, otro novillo manejable que tuvo bravura y con el que pudo estirarse con la capa el venezolano y volver a poner la plaza a hervir en banderillas. Sacó valor y firmeza en la muleta, con pasajes de buen toreo y una estocada contundente que le puso en la mano una oreja de peso.

El francés Andy Younes certificó con el buen sexto la oreja que le faltaba para abrir la puerta grande y ser el triunfador de la novillada. Muy dispuesto, estuvo armónico con el capote y variado en quites. Comenzó en los medios de rodillas, con tandas de seis y el remate para exprimir al extraordinario novillo del gran encierro de Virgen María. La espada no funcionó a la perfección, por lo que fue una oreja el botín cosechado.

FICHA DEL FESTEJO

Plaza de toros de Mont de Marsan. Quinta de la Feria de la
Magdalena. Novillada con picadores nocturna.

Seis novillos de Virgen
María.

Pablo Aguado, oreja y palmas.

Jesús Enrique Colombo, palmas y oreja.

Andy Younes, oreja y oreja.