JAVIER FERNÁNDEZ-CABALLERO
El subalterno José Manuel Soto, que sufrió un gravísimo
percance el domingo en la localidad jiennense de Peal de Becerro finalmente perdió
la pierna el pasado viernes. Desde entonces, y tras conocer la tristísima
noticia, han sido innumerables las muestras de cariño hacia su persona que la
familia taurina ha demostrado.
Hoy, el subalterno José Luis Neiro, paisano, amigo e
interlocutor de su entorno estos días por la cercanía que le une a Soto, ha
declarado a CULTORO que «está más animado. Él dice que ha perdido lo
que más le gusta haciendo lo que más le gusta: torear. Está animándose poco a
poco al ver cómo todo sale hacia adelante».
Neiro señala sobre la pérdida que «es una pena porque el toreo
pierde a un subalterno con gran experiencia y que, a sus 37 años ya no podrá
ejercer su profesión”, señaló el algabeño. Además, añadió que«vamos a intentar montarle un festival a Manuel todos los que le queremos,
algo grande. Ojalá y pueda ser en Sevilla, ojalá…”.
Sobre este tema, Neiro transmitió el agradecimiento del
propio José Manuel Soto, quien ha agradecido a «toda la familia taurina por cómo
se está volcando en lo que le ha ocurrido. Está contento por cómo se han
portado todos los compañeros, por cómo las figuras se han prestado a torear un
festival en su favor, por cómo los banderilleros no han cesado de llamar porque
quieren torear por él, por cómo hasta los mozos de espadas están entregados a
la causa… es increíble cómo se ha volcado la familia taurina por este percance”,
concluyó Neiro.
Fue un novillo de Los Ronceles el que, actuando a las
órdenes del novillero Adrián Grande e intentando cortar al novillo en el tercio
de banderillas, hizo por él y lo estrelló contra las tablas. Ya allí, se cebó
con el fémur y produjo grandes destrozos en la rótula y los músculos internos y
externos de la zona, afectando también gravemente la safena y la femoral por
aprisionamiento.
