VALLADOLID

Juli y David Mora puntúan; Talavante baila con el peor lote


sábado 10 septiembre, 2016

No terminó de romper la corrida de El Pilar en la que El Juli mostró su capacidad frente al primero y David Mora deleitó en el tercero; sin opciones el toreo maduro de un Talavante sin lote

No terminó de romper la corrida de El Pilar en la que El Juli mostró su capacidad frente al primero y David Mora deleitó en el tercero; sin opciones el toreo maduro de un Talavante sin lote

EMMA GORJÓN

El Juli, Alejandro Talavante y David Mora –que sustituía al
lesionado Andrés Roca Rey- hacían esta tarde el paseíllo en la plaza de toros
de Valladolid dentro de la cuarta corrida de toros de su abono. Un encierro de
El Pilar era la materia prima para la ocasión.

El Juli abrió la cuarta de abono con Medicito, bien
presentado de buenas hechuras, al que probó por verónicas en los medios y
continuó con un quite por chicuelinas. Comenzó la faena de muleta por
derechazos, metiendo la cara el toro. Se pasó por naturales rematando por todo
lo alto. Siguió la faena de frente arrastrando la muleta en la arena. Acabó con
naturales de porfía con sacacorchos. Remató con una gran estocada un poco
contraria. La faena fue premiada con una oreja.

El segundo para Talavante, Alambito, un toro que salió
suelto y fue perdiendo gas a lo largo de la faena. El toro fue devuelto por
inválido. Salió el sobrero, Deslumbrero, no mejor que el anterior. Era
imposible para la lidia, descoordinado completamente. Talavante lo intentó pero
fue imposible, no lo probó apenas con el capote solo con un par de verónicas. A
pesar de las continuas protestas del público el toro no fue cambiado. Con la
muleta tuvo que abreviar porque el toro se caía continuamente, dejando ver
pequeños detalles en sus naturales. Remató con una buena estocada. Pitos al
toro. Silencio.

El tercero de nombre Deslumbrero para David Mora, siendo la
primera vez que pisaba el albero vallisoletano. Lo recibió por verónicas,
siguiendo con un quite por chicuelinas. Siguió con la muleta por derechazos.
Encandiló al público con sus continuos cambios de mano y el toreo en redondo,
siempre dándole sitio al toro. Remató con una estocada caída y atravesada.
Oreja.

El tercero de nombre Deslumbrero para David Mora, siendo la
primera vez que pisaba el albero vallisoletano. Lo recibió por verónicas,
siguiendo con un quite por chicuelinas. Siguió con la muleta por derechazos.
Encandiló al público con sus continuos cambios de mano y el toreo en redondo,
siempre dándole sitio al toro. Remató con una estocada caída y atravesada.
Oreja.

El cuarto, Miraboro, de las mismas características que los
anteriores. Fue perdiendo fuerza a lo largo de la faena. El Juli conoció al
animal y abrevió con el capote luciéndose solo con un par de verónicas. Con la
muleta una serie de naturales y derechazos intentando sacarle algo al toro pero
era imposible su embestida. Tras un pinchazo una estocada trasera. Silencio.

El quinto, Mirado, para Talavante. El toro fue algo mejor
que los anteriores al menos embestía. Lo midió por verónicas en el capote. Con
la muleta animó al público vallisoletano combinando sus derechazos con
sentimiento acordes con la música. Siguió con dos series más de naturales
rematando por lo alto. Tuvo que abreviar la faena porque el toro no podía más,
iba perdiendo fuerza u se caía. Remató con una estocada atravesada. Talavante
se llevó la ovación del público.

El último para David Mora, Dudoso, hizo gala del nombre. El
torero realizó una vistosa faena con el capote, con seis verónicas seguidas muy
ajustadas rematando con la media. Siguió por chicuelinas que consiguieron
calentar un poco al público tras una tarde heladora en el Albero. Con la faena
de muleta David Mora se lució más que en el toro anterior, con naturales muy
despegados. Siguió por derechazos. Remató con una estocada entera. Silencio.

 

FICHA DEL FESTEJO

Plaza de toros de Valladolid. Cuarta del abono de la Virgen
de San Lorenzo. Corrida de toros. Lleno.

Seis toros de El
Pilar.

El Juli, oreja y silenio. 

Alejandro Talavante, silencio y ovación. 

David Mora, oreja y silencio.