ENTREVISTA

Eduardo Gallo: “El temple es la receta que sirve para todos los toros y Madrid lo vio“


martes 20 septiembre, 2016

El pasado domingo el toreo de Gallo caló a través del temple en la plaza de Madrid; ahora lo cuenta a CULTORO

El pasado domingo el toreo de Gallo caló a través del temple en la plaza de Madrid; ahora lo cuenta a CULTORO

JAVIER FERNÁNDEZ-CABALLERO / FOTOGALERÍA:
LUIS SÁNCHEZ OLMEDO

El pasado domingo el toreo de Eduardo Gallo
caló a través del temple en la plaza de Madrid. Una corrida de Lagunajanda que
no terminó de romper hizo sacar agallas a la terna compuesta por Iván Vicente,
el propio Gallo y Esaú Fernández y los titulares finales fueron para el torero
charro. Hablamos con él en las horas posteriores a ese triunfo moral más que
físico.

¿Cómo te encuentras un día después de esa
gran sensación en la primera plaza del mundo?

La
verdad que las sensaciones son muy positivas. Pude torear a los dos toros muy
despacito, muy templado, muy a gusto. Tanto como yo me vi cómo la gente me vio
es que a pesar de que he toreado una corrida en España y dos en Perú son de que
estoy toreando todos los días, y con esa frescura que se tiene cuando estás
acostumbrado a torear.

¿Con qué te quedas de la tarde y qué
quitarías de ella?

Lo que
quitaría es la espada, que en el segundo toro le di a la banderilla o se
tropezó el toro y se fue muy abajo. Todos los toros que he estado matando en el
campo los he matado bien y esa fue una de las cosas que más rabia me dio. En
cuanto a las cosas positivas, lo despacito que toreé a los dos toros, lo
vertical que lo hice. Es una de las cosas que más estoy buscando últimamente en
mi forma de torear. Con lo que puedo sorprender es con el toreo bueno, que es
lo que siempre los aficionados me han cantado. Desde luego los medios me lo
habéis cantado por eso, por intentar torear despacito. Al final que los toros
embistieran un poquito más fue gracias al temple con el que toreé los dos
animales.

Mirándolo por el lado bueno, estos doce años
de alternativa te han servido para enfrentarte de esa forma a un encierro
desrazado que, sino tuvieses esa experiencia, no habría tenido el resultado del
que estamos hablando.

Lógicamente
cuando ya llevas doce años como matador de toros eso se nota. Se nota y en mi
caso se está notando para bien. Hoy por hoy creo que me valen un gran número de
toros. No hubo oreas porque a la corrida le faltó para Madrid ese puntito que el
aficionado exige en esa plaza, pero gracias a la madurez y al temple conseguí
calar. Aunque siempre me han cantado el temple, es una de las cosas que más he
buscado potenciar en este último año. Es la receta que sirve para todos los
toros.

Supongo que ya pensando en San Isidro.

Ojalá
que entremos el año que viene en Madrid en San Isidro. La afición de Madrid
siempre me ha querido mucho, es mi plaza y la gente me respeta mucho. Ojalá que
vuelva pronto y ojalá y me sirviera para entrar en algún otro sitio de los que
quedan por delante

¿Qué queda por delante esta temporada y, de
cara a América, cómo vas a plantear la temporada al otro lado del charco?

De
momento no tenemos nada más. Estamos pendientes de algún festival que pudiese
salir o alguna corrida de toros en México. Ojalá que esa corrida sirva para poder
entrar en algún sitio en América.