EDITORIAL

¡Empresarios, a por Vitoria de nuevo!


viernes 10 marzo, 2017

El empresariado taurino necesita partirse la cara con la música, el cine o el teatro para hacerse con la gestión del Iradier Arena esta temporada durante la Feria de La Blanca

El empresariado taurino necesita partirse la cara con la música, el cine o el teatro para hacerse con la gestión del Iradier Arena esta temporada durante la Feria de La Blanca

Si entre todas las propuestas que se presenten en el
nuevo pliego del Iradier Arena de Vitoria a actividades «lúdicas o
culturales” –entre las que claramente se encuentra la tauromaquia- sale un alto
porcentaje destinada a festejos taurinos, veremos a ver si el Ayuntamiento de Gorka Urtaran no retrocede en su ímpetu abolicionista y decide que el toreo
importa para la sociedad alavesa. Pero no se necesita un alto, sino un altísimo
porcentaje. Casi la totalidad. Que haya rivalidad con otros sectores
culturales. Que se partan la cara con la música, el cine o el teatro que van a
presentar otro tipo de empresas. Es el momento de no tirar la toalla e ir hacia
adelante.

Además, ha dejado la puerta medio abierta el
Consistorio:«El
pliego no excluye espectáculos taurinos, pero es muy poco probable que se den,
sobre todo en el momento en que hay que echar arena, por ejemplo para celebrar
vaquillas, pues resulta difícil que se puedan organizar otras actividades en el
mismo día”,
resaltó el Ayuntamiento en declaraciones a El Correo en su
edición alavesa.

Ahora está en que, si el toreo aprovecha esta
segunda actividad, debe presentar para intentar validar su oferta más
actividades: que no sean estrictamente las taurinas las que copen el grueso de
la programación de las plicas taurinas. Que se rasquen la cabeza los que mandan
en esto para no perder una plaza más. Que incluso confíen en otras empresas de
espectáculos esos 30.000 euros para centrarse «a pelo” en lo que es la
parte estrictamente taurina.

Con el potencial económico que tiene el toreo, no es
difícil presentarse a un pliego en el que se pueden organizar esos 30.000 euros
en actividades lúdicas y dos corridas de toros durante los días de las fiestas
de la Blanca que no hagan caer en pozo negro una Feria de solera en el norte
español. El pliego está en la calle. La afición necesita Vitoria, y este es un
resquicio necesario para devolver los toros a la ciudad de la que nunca se
fueron pero que puede convertirse en una batalla perdida en potencia el próximo
mes de agosto. No nos lo podemos permitir.

Y en el deber más comunicativo que defensor de la
Fundación, también está saber comunicar esta situación a todos los empresarios
que, en potencia, pueden y deben presentarse al nuevo pliego de condiciones de
actividades «lúdicas y culturales” de la plaza de Vitoria. Aunque sea un
escándalo por parte de su alcalde. Aunque sea un despilfarro innecesario del
Ayuntamiento.