“No tengo palabras para describir lo que he sentido”. Así se expresaba al micrófono de Toros Emilio de Justo tras cortar las dos orejas del quinto esta tarde en Madrid, un triunfo que supone su tercera Puerta Grande venteña.
“La verdad que ha sido muy emocionante lo que se ha vivido, he conseguido un sueño como torero. Conseguir muletazos tan profundos con un toro bravo no es fácil, pero gracias a Dios lo he conseguido. Ha sido una temporada preciosa, en la que he dado pasos grandes como torero e interiormente necesitaba estar así de nuevo en Madrid”, señaló.
Sobre su primero, dijo que “el toro se ha ido viniendo muy abajo. He tratado de ir haciéndolo poco a poco al principio. Era noble. A ver si el otro ayuda. Por momentos me he gustado, he tratado de hacerlo todo despacio, buscando sobre todo la colocación, pero en la segunda o tercera tanda, el animal se ha parado”.