El arenero más legendario de la plaza de toros de Las Ventas ha fallecido esta madrugada, dejando a la tauromaquia huérfana de sus personalísimos dibujos. Nacido en Madrid en 1937, su miles de dibujos, con ese estilo tan personal e inconfundible, han sido cronistas de la historia de la plaza.
De hecho, esta ha sido la primera temporada en que ha faltado a su cita con los festejos venteños desde que tenía 26 años, cuando entró a trabajar en la plaza, ya con los estudios de Bellas Artes cursados. Su estado de salud, muy mermado ya en los últimos meses, le impidió asistir a Las Ventas, pero no fue óbice para el Centro de Asuntos Taurinos le dedicase un azulejo en la plaza, en un homenaje que, a sus 83 años, le conmovió profundamente.
Con más de 1.300 paseíllos a sus espaldas, César Palacios es el hombre que más veces ha realizado el trayecto entre la Puerta de Cuadrillas y la presidencia. Activo del inmueble desde 1980, trabajó también como acomodador y portero antes de desempeñar la función de arenero y ganarse su sitio en el burladero del callejón incluso después de jubilado.
La última gran obra de César Palacios en Las Ventas, el cartel de la Goyesca de 2018
En 2018, el Centro de Asuntos Taurinos de la Comunidad de Madrid le encomendó ilustrar el cartel anunciador de la tradicional corrida de toros Goyesca del 2 de mayo, obra que actualmente se encuentra expuesta en el Museo Taurino de la plaza. Su producción artística, centrada en el mundo del toro, el dominio del color y el dibujo directo, y recogida en varios libros, la ha mostrado en más de 60 exposiciones en España, Alemania, Francia y Estados Unidos.
El artista del dibujo con rotulador y plumilla por antonomasia, ha probado con el óleo, la acuarela y la pintura acrílica, y con escenarios y modelos fuera del ámbito taurino; incluso con la corriente abstracta. Pero su locura por el toro definió su vida y su obra.
La redacción de CULTORO quiere tributar un homenaje a su figura y enviar un cálido abrazo a su familia.
Descanse en paz.