El campo bravo parece percibir un mínimo atisbo de esperanza con las noticias han llegado estas semanas. A la apuesta por la feria de Sevilla, se suma la jugada de Matilla de dar toros por San Isidro en Vistalegre, algo que ha aumentado la moral de todo el sector y especialmente de los ganaderos. Así lo expresa Justo Hernández, ganadero de Garcigrande, que pese a dejar atrás un año casi sin ingresos, no pierde el optimismo y confía en que la situación mejore y se “pueda dar la vuelta a la tortilla”. Con todas sus miradas centradas en Sevilla, ultima los preparativos para la primera de las corridas que tendrá que lidiar en La Maestranza este año, el 30 de abril con “El Juli”, Perera y Roca Rey en el cartel. Nos cuenta sus impresiones en una entrevista.
¿Cómo está actualmente la ganadería? ¿Se han eliminado muchos animales?
La ganadería está bien y todo está preparado para que haya temporada. Tenemos la ilusión de que esto se arregle, pero ha sido un año impensable y muy duro en todos los sentidos, especialmente el económico. Hemos tenido prácticamente cero ingresos y eso es muy difícil de llevar para una ganadería brava.
Vais a poder lidiar en Sevilla dos corridas, una en abril y otra para San Miguel, si todo sale bien. ¿Cómo lo afrontáis?
Lo afrontamos con mucha responsabilidad y con mucho miedo. Cuando te acuerdas te duele el estómago por la responsabilidad. Lo estamos preparando como si fuera a salir adelante y son dos corridas muy de Sevilla. Esa plaza tiene un toro muy particular, serio y armónico a la vez.
“El anuncio de Sevilla nos ha dado mucha moral a todos los taurinos”
¿Cómo crees que será el resto de la temporada?
Soy mal futurólogo. El año pasado pensaba que se iban a dar toros a final de temporada y me equivoqué. Me imagino que será una temporada que vaya a más. En estas primeras corridas habrá más problemas en cuanto a público, pero cuando la vacuna vaya funcionando, irán aumentando los aforos y mejorarán las cosas.
¿Hay muchas corridas preparadas para salir de la finca?
En principio, toda la temporada está echada para delante. Dependemos de la pandemia y estamos en manos del COVID. Al margen de lo que ocurra, el anuncio de Sevilla nos ha dado mucha moral a todos los taurinos y todo el mundo se ha puesto a hacer cosas alrededor de esas fechas. Los toreros han cogido una moral tremenda y ha sido una noticia muy positiva para el toreo.
“A lo largo de la historia ha habido épocas de crisis y otras de apogeo. ¿Por qué no vamos a dar la vuelta a la tortilla?”
El año pasado decidísteis separar los hierros de Domingo Hernández y Garcigrande. ¿Por qué se tomó esta decisión?
Cuando mi padre vivía, estaba claro que él era dueño y todos íbamos a sus órdenes. Pero tras su muerte decidimos que todo el mundo tendría que tener su sitio en su ganadería y nos dividimos. Ahora, son ganaderías similares, pero con el tiempo irán diferenciándose.
“Del político no espero nada que no le interese a él”
¿Cómo ves la situación de los criadores de toro bravo en el futuro?
La situación es difícil para todos. Soy optimista, pero dependemos que se den toros, que el público abarrote las plazas y que los toreros generen entusiasmo en los públicos. Sólo nos sirve que los ídolos calen en la sociedad. A lo largo de la historia ha habido épocas de crisis y otras de apogeo. ¿Por qué no vamos a dar la vuelta a la tortilla? Yo soy optimista. Siempre que ha venido un momento bajo, luego ha venido otro alto.
¿Os sentís respaldados por las administraciones públicas?
Estamos yendo detrás del político y tenemos que conseguir que el político venga detrás de nosotros. Lo que tenemos que hacer es que les interese el toreo y para eso, necesitamos que el toreo tenga un gran impacto en la sociedad española. No he recibido ayudas del político porque no espero nada que no le interese a él.
¿Qué cosas son urgentes de cambiar en el sector?
Uno de los grandes problemas es la falta de novilladas porque los costes de producción no tienen nada que ver con lo que generan. Habría que protestar y dejar de pagar cosas que no son lógicas porque se trata de costes generados por la administración.
Foto: Fermín Rodríguez