Tan sólo cinco días después de que el epicentro del toreo volviera a abrir sus puertas, la feria que arranca hoy en Leganés supone la confirmación del regreso. Lo es porque ratifica que la vuelta de los toros a la Comunidad de Madrid ya es una realidad y porque reafirma que el festival de Las Ventas no fue un mero espejismo ni un oasis en el desierto ideado únicamente para conseguir un puñado más de votos (porque se han autorizado ya tres Ferias y la confirmación de que no fue así debe ser la rápida puesta en marcha de un nuevo acuerdo entre empresa y CAM para culminar la reapertura de Las Ventas con un ciclo periódico de festejos). El camino que queda atrás ha sido tedioso, largo y desesperanzador, pero ahora sí, los toros están de vuelta en Madrid.
El pulso que lanzó Alberto García a la Comunidad cuando anunció la feria y solicitó un aforo mínimo para poder celebrarla, ha dado finalmente sus frutos y habrá toros en Leganés. Eso sí, un mes después de las fechas inicialmente anunciadas.
«En el fin de semana en que se pondrá fin al Estado de Alarma, la afición dispondrá de otra nueva oportunidad de oro para demostrar que quiere toros»
Ahora, la afición tiene la palabra y la mejor forma de hablar es llenando todo el aforo disponible de la Cubierta. En el fin de semana en que se pondrá fin al Estado de Alarma en nuestro país, decayendo con él cierres perimetrales y toques de queda en algunas comunidades autónomas, la afición dispondrá de otra nueva oportunidad de oro para demostrar que quiere toros como ya lo hizo hace sólo unos días agotando todas las entradas disponibles para el festival de Las Ventas en tan sólo dos horas.
Con una oferta artística atractiva y variada, unos precios asequibles y un gran trabajo de promoción, Tauroemoción ha logrado sacar adelante la primera feria taurina de la Comunidad de Madrid en pandemia. Y es que a todos los carteles les sobran argumentos para ilusionar al aficionado en una feria completa, rematada y con sensibilidad.
La vuelta de Javier Cortés tras su grave cornada en Madrid y el cartel estrella con Ponce, Emilio de Justo y Juan Ortega son sólo los atractivos más llamativos de un fin de semana que arranca hoy con la novillada de Santa Coloma y con una terna internacional de novilleros punteros con la ambición y ganas propias de quien sueña con triunfar como torero. La inclusión de toreros jóvenes como Ginés Marín y Román, la variedad ganadera y la apuesta por el festejo popular con el concurso de recortadores con los patas blancas de Monteviejo del domingo componen un fin de semana en que Leganés se convertirá en el centro neurálgico del toreo.
«La respuesta de la afición en este mes de mayo taurino en Madrid será crucial para que la primera plaza del mundo eche a andar con el proyecto de plaza de temporada ilusionante que merece»
Y es que Leganés debe actuar como punta de lanza de lo que vendrá después, un mes de mayo de toros en Madrid con un San Isidro que este año se traslada a Vistalegre y que abrirá el telón de las grandes ferias y los carteles importantes. Los toros vuelven a Madrid como agua de mayo por primavera en un mes que el año pasado nos hizo ver de nuevo la luz después de la oscuridad del confinamiento y que este año nos devolverá las tardes de toros que la pandemia nos arrebató. La respuesta de la afición en este mes de mayo taurino en Madrid será crucial para que finalmente la primera plaza del mundo eche a andar con el proyecto de plaza de temporada ilusionante que merece la capital del orbe taurino.
