Ángel Jiménez imprimió su sello en el albero sevillano de La Maestranza la tarde su alternativa. Ese día de San Miguel de 2019 calaron sus formas despaciosas, su concepto clásico y ese aroma a torería que tanto gusta por el Arenal. Después llegó la pandemia y con ella, casi dos años de banquillo para el diestro astigitano, que no ha tenido la oportunidad de volver a torear desde entonces. Por fin, la espera toca a su fin y el toro volverá a salir por chiqueros este sábado en la plaza de Utrera en una cita en la que Jiménez confía en poder demostrar todo lo que lleva dentro, que es mucho, delante del toro. Nos cuenta sus impresiones previas en una entrevista con CULTORO.
Te vas a vestir de luces este sábado en Utrera junto a Rafael Serna y Alfonso Cadaval con una corrida de Lola Domecq. ¿Cómo la afrontas?
Afronto este compromiso con muchísima ilusión después de lo que hemos pasado y lo que estamos pasando. Desde que tomé mi alternativa, no he podido vestirme de luces y este sábado vuelvo a vestirme de torero en mi segunda corrida de toros. Tengo mucha ilusión y muchas ganas de poder mostrarme.
«Carmelo ha apostado por la savia nueva de matadores recién alternativados y ha quedado un cartel muy bonito»
El cartel reúne a las ilusiones más recientes de la afición sevillana. ¿Lo sientes así?
Mis dos compañeros de cartel son dos toreros a los que respeto y admiro mucho. Se ha quedado un cartel muy bonito, con el que se abre ese abanico a toreros jóvenes y no tan conocidos. Carmelo ha apostado por la savia nueva de matadores recién alternativados y ha quedado un cartel muy bonito.
El último en tomar la alternativa de los tres has sido tú…
Sí, he sido el último en hacerlo en Sevilla en la feria de San Miguel del año 2019. Desde entonces, sé que en muchos aficionados hay un run run y ganas de verme. Han pasado casi dos años sin poder vestirme de luces y la del sábado es una tarde muy especial.
Este año no ha podido ser. ¿Sueñas con volver pronto a Sevilla?
Sevilla es una plaza que me hace soñar, me hace ilusionarme y motivarme y la espero con la misma ilusión desde que pude torear la primera vez con caballos. La tarde de mi alternativa pude salir triunfador. Hay que tener paciencia y sé que no hay mal que por bien no venga. No es fácil poder dar forma a una feria como la de Sevilla, pero hay que confiar y ser positivos en que esto vaya hacia adelante y que el año que viene todo se encamine para poder verme anunciado en otras plazas.
«Creo que un artista tiene que buscarse a sí mismo continuamente, por eso, cada día intento avanzar en lo profesional y en lo personal»
¿Qué ha supuesto para ti este parón de casi dos años?
Yo soy una persona que no paro de buscarme a mí mismo. Cada día intento avanzar en lo profesional y en lo personal. La pandemia me ha servido para seguir avanzando en los entrenamientos, en el campo y para ir dándole forma a lo que quiero sacar en la plaza. He intentado buscarle el lado positivo en profundizar mi tauromaquia y mi persona y cada día ir reuniendo esas piezas del puzzle para llegar a mi forma de sentir y de expresar.
¿Cómo se consigue reunir esas piezas y evolucionar?
Me considero artista y creo que el artista nunca deja de buscar. Esa búsqueda continua la he tenido en el toreo de salón. Soy una persona que ama su profesión y vivir en torero es algo que me sale natural, no me cuesta trabajo. Soy feliz toreando con mi capote y mi muleta en las manos y para mí es una suerte poder sentirme realizado toreando.
«El toreo es una forma de expresión y de libertad, pero todo depende mucho de las circunstancias que estés atravesando en cada momento. Desde que tengo uso de razón, siempre he soñado con el toreo»
Tus formas son muy suaves, tu manera de torear está impregnada de clasicismo…
Uno intenta buscar la pureza y el toreo despacioso y ser uno mismo según los momentos y las circunstancias que uno esté viviendo. El toreo es una forma de expresión y de libertad y creo que no soy un torero que pueda tener un patrón. Todo depende de las circunstancias que uno esté pasando, pero cada vez voy poniendo las cosas más firmes en mi tauromaquia y en mi forma de sentir. Cada torero tiene su forma de sentir y expresar y yo tengo la mía y es ahí donde tengo mi búsqueda continua que nunca para. Uno nunca se quita de esto aunque se aleje de los ruedos.
¿Qué ha significado para ti el maestro Pepe Luis Vargas?
El maestro Pepe Luis Vargas me enseñó a pegar mis primeros muletazos, me enseñó cómo se coge una muleta, como andar por la plaza. Me lo enseñó todo. Desde que tengo uso de razón, yo he soñado con el toreo y el maestro me ha visto y le tengo mucho que agradecer. Me ha aportado toda mi base como torero, le pone mucha pasión a todo y es una fuente para mí tanto en lo personal como en lo profesional.
«Ojalá el sábado pueda parar el tiempo con mi capote y mi muleta»
Más allá de Utrera. ¿Cómo crees que será tu temporada?
Ojalá pudiera torear un número importante de corridas esta temporada, pero ahora mis cinco sentidos están únicamente puestos en el sábado y en poder demostrar lo que llevo dentro. Quiero disfrutar de los momentos previos porque todo eso es muy bonito. Ojalá el sábado pueda parar el tiempo con mi capote y mi muleta. Si sale bien Utrera, ya saldrán más oportunidades. Todo irá llegando, hay que tener fe y paciencia. El toreo no es de números, es más de otras cosas. Lo que más me ilusiona a mí es que el aficionado se ilusione conmigo y vean un torero con ganas de poder alcanzar cosas.
