Comenzaba la feria de Soria, después del parón de 2020, con tres cuartos de entrada en el aforo permitido para ver a Diego Urdiales, Emilio de Justo y Juan Ortega con una corrida de Román Sorando.
Diego Urdiales saluda una ovación con el deslucido primero
Pocas opciones tuvo Urdiales con el deslucido primero, que se apagó pronto y le cerró la puerta del toreo al riojano, a pesar de su intención siempre de no desfallecer.
Emilio de Justo le corta la primera oreja al segundo a media altura
Al segundo le pegó Soria una ovación de salida por su magnífica presentación. Sin embargo, fueron embestidas a media altura y sin mucha entrega las que le dejó a De Justo, que lo ve claro todo por regular que sea. Mano diestra firme y una estocada contundente bastaron para pasear la primera oreja de la tarde y de la feria.
Los aceros emborronan una gran faena de Ortega al tercero
La de Juan Ortega al tercero fue una gran faena, pero volvió a cruzarse en su camino el mal uso de los aceros. Empacado, natural y con mucha conexión con el tendido con las telas, todo se volvió negro al manejar la tizona y, sobre todo, el descabello, que dejó el premio en ovación.
Una oreja para la profundidad de Urdiales con el cuarto
La faena de Urdiales al cuarto tuvo el sabor del toreo puro del riojano, pero quizá le faltó tomar algo más de vuelo y de continuidad en los pasajes de calidad que firmó. Lo mejor llegó a diestras, con la exigencia justa y el temple máximo para conservar el fondo del de Sorando. Oreja.
Emilio de Justo impone su autoridad desorejando al quinto
Al quinto le cuajó Emilio de Justo una faena completa que tuvo sus principales pasajes en el toreo encajado y profundo con la mano derecha. Autoridad y naturalidad fueron las armas del extremeño para terminar desorejando al de Román Sorando.
Juan Ortega rinde al tendido de nuevo sin espada
De nuevo sin espada, Juan Ortega cuajó una faena plena de naturalidad y de emoción con el buen sexto, al que le dejó un ceñimiento estético y lento que no dejaba lugar a las dudas. Pero el problema de llegar al momento supremo volvió a hacerse presente en el sevillano, que vio cómo se arruinaba una gran obra.
FICHA DEL FESTEJO
Plaza de toros de San Benito, Soria. Primera de feria. Corrida de toros. Tres cuartos de entrada sobre el aforo permitido.
Toros de Román Sorando. Muy bien presentados.
Diego Urdiales: ovación y oreja.
Emilio de Justo: oreja y dos orejas.
Juan Ortega: ovación y oreja.
FOTOGALERÍA: RAÚL VALDIVIESO
