Manuel Escribano, Esaú Fernández y Joaquín Galdós trenzaban el paseíllo este 11 de septiembre en la localidad burgalesa de Aranda de Duero en la apertura de su Feria taurina. Se lidiaba un encierro del emblemático hierro de Miura.
Una oreja paseó del primero Manuel Escribano, un animal remiso a embestir y que se fue orientando durante la lidia y que soltaba la cara. Firme el sevillano tanto de capote como en banderillas, lo intentó todo en la muleta y acabó por arrancarle un premio.
La espada le quitó el pelo a Esaú Fernández tras lidiar a un segundo con el que estuvo entregado en todo momento. Animal que no regaló nada y al que había que llevar sometido para que embistiese, finalmente se atascó Fernández con el descabello y dio una vuelta al ruedo.
Ni un pase absolutamente tuvo el tercero de la tarde, el toro del debut de Joaquín Galdós con el hierro de Miura. Fue un animal con el que lo intentó de todas las formas posibles el peruano teniendo como “premio” caras altas y envites peligrosos del astado de Zahariche. Ni una posibilidad.
Otra oreja le cortó al cuarto Escribano al que dejó otro vibrante tercio de banderillas después de cuajarlo con el capote. El torero sevillano tiró de oficio esperando siempre al toro, que tuvo unas embestidas descompuestas y falta de entrega. Pinchazo y estocada.
Vuelta al ruedo tras petición para Esaú en el segundo de su lote. Gran faena del diestro camero que, tras rubricar con una estocada, tuvo que hacer uso del descabello, el cual le privó de nuevo de pasear algún apéndice.
Tampoco tuvo ni uno el sexto, con el que anduvo digno Galdós, pero el animal punteaba y soltaba la cara y no fue nada fácil.
FICHA DEL FESTEJO
Plaza de toros de Aranda de Duero (Burgos).
Toros de Miura.
Manuel Escribano, oreja y oreja.
Esaú Fernández, vuelta y vuelta.
Joaquín Galdós, silencio en ambos.
