ENTREVISTA

Daniel Menés, ante su alternativa: «Siempre soñé que Víctor Barrio fuera mi padrino y sé que estará vestido de torero en esa ceremonia»


viernes 3 septiembre, 2021

El caprichoso destino, ese que ha puesto tantas veces contra las cuerdas a Daniel Menés, ahora le sonríe para decirle que todo llega y que va a poder cumplir su sueño de tomar la alternativa. Lo hará el 15 de septiembre en Madridejos de manos de Raúl Rivera en una tarde en la que en la tribuna de arriba habrá un sitio especial reservado para su inseparable amigo, un sitio para Víctor Barrio.

8 Daniel Menes Madridejos Brindis

Por Javier Espada

A Daniel Menés la vida le ha obligado a hacerse un tío y tirar hacia delante por cojones. Esos que le han sobrado para sacudirse el polvo, levantarse sin mirarse y sobreponerse a los reveses más duros, a los golpes más crueles con los que se ha tenido que topar en su camino. Y es que su historia es de la que impresionan, sobrecogen e impactan. Y mucho. El toro, ese que lleva en la sangre de nacimiento, por el que ha vivido y para el que lleva viviendo durante toda su vida, quiso ponerlo al límite en Arnedo en septiembre de 2019. Una cornada terrorífica de un novillo de Partido de Resina lo mandó a una cama de hospital durante más de dos meses y le arrancó todas las esperanzas e ilusiones de un plumazo. Adiós a torear y adiós a su sueño de ser torero porque no podría volver a ponerse delante de un toro. Y ahí salió el torero. La persona, humana, débil y sensible, dejó paso al torero, ese que destaca por una afición que raya lo enfermizo, una mentalidad ganadora, una capacidad de superación sin límites y una ilusión desbordante. Y lo consiguió. Logró lo que le habían dicho que era imposible. Porque estos hombrecillos que se visten de luces cada fin de semana nunca dejan de enseñarnos que en la vida nada hay imposible. Que los médicos no entienden de sueños ni de ilusiones y que cuando todo eso está de por medio, no existen las barreras. Eso demostró Daniel Menés después de la cornada.

Por el camino también se quedaron personas que dejaron un vacío imposible de llenar. Su madre y Víctor Barrio, su amigo íntimo e inseparable con el que creció y aprendió. Golpetazos durísimos para un joven de apenas 20 años como él tenía en aquellos momentos. Pero este destino caprichoso, que a veces nos pone en jaque para hacernos más fuertes, es el mismo que ahora sonríe a Daniel. Lo sonríe para decirle que todo llega y que su sueño se va a cumplir. Llegará el próximo 15 de septiembre en la plaza de toros de Madridejos, donde tomará la alternativa con Raúl Rivera como padrino y Álvaro Lorenzo como testigo con toros de Alcurrucén. Una tarde en la que todos los que se fueron estarán en tribuna y habrá un sitio muy especial reservado para alguien que honró a la tauromaquia con su vida y que dejó una huella imborrable en Daniel, habrá un sitio especial para Víctor Barrio.

Los sueños se cumplen y tú vas a poder cumplir el tuyo el próximo 15 de septiembre…

Desde que tengo uso de razón, mi sueño siempre ha sido ser torero. De niño, mis héroes siempre eran los matadores de toros y el día 15 por fin voy a poder cumplir ese sueño. Estoy muy ilusionado y feliz, pero a la vez muy responsabilizado porque me juego mi presente más cercano y mi futuro en el día de mi alternativa.

«Cuando más parecía que me iba a costar seguir mi camino, apareció la llamada en la que me decían que tomaba la alternativa y me eché a llorar de felicidad»

Cuando la empresa te propuso la alternativa. ¿Lo dudaste o no te lo pensaste?

Cuando me lo comunicó Jesús Salas, (el empresario) estaba trabajando. Estaba con mi jefe y me eché a llorar de la emoción porque es toda una vida luchando por lo mismo. He vivido cosas muy bonitas como los triunfos de Madrid, en México, pisar plazas tan importantes como Bilbao, Logroño, Málaga, o algunas de Francia, pero también momentos muy duros como percances, cornadas, la muerte de un íntimo amigo mío que fue como mi hermano, mi madre. Cuando parecía que me iba a costar mucho seguir mi camino, apareció esta llamada y me eché a llorar de la felicidad.

Además, va a ser un amigo como Raúl Rivera quien te va a dar la alternativa

Raúl me saca unos cuantos años, pero yo he vivido siempre en la Escuela Taurina de Madrid y cuando era pequeño, él estaba en la Escuela y ya formaba líos en las becerradas. Lo admiro desde pequeño, tengo una amistad guardada con él desde hace muchísimo tiempo y me alegra mucho que sea el padrino de mi alternativa porque además de admirarlo como torero, es un gran amigo mío.

«Siempre soñé que mi padrino fuera Víctor Barrio y sé que en esa ceremonia de mi alternativa él también estará vestido de torero»

Pero tu amigo inseparable, Víctor Barrio, estará muy presente ese día. ¿Verdad?

Víctor fue una pieza clave en mi vida sobre todo en lo personal. Me voy a acordar muchísimo de él. Siempre soñé que mi padrino fuera Víctor Barrio, me alegro mucho que sea Raúl, pero en esa ceremonia de mi alternativa Víctor Barrio estará también vestido de torero.

La alternativa será con Lorenzo como testigo y los toros de primera, de la ganadería de Alcurrucén…

Con Álvaro Lorenzo debuté con caballos en Arnedo y ahora voy a tomar la alternativa. La ganadería de Alcurrucén es de primer nivel, estoy muy contento por el prestigio y por el cariño que mi familia tiene a los Lozano porque fueron bastantes años jefes de mi padre, que fue mayoral de la Escuela Taurina de Madrid y La Venta del Batán, donde llevaban los toros de San Isidro y por aquellos años los Lozano eran los empresarios de Madrid. Se portaron muy bien con mi padre y les guardamos mucho cariño.

La alternativa llega como recompensa tras unos meses muy duros. La cornada de Arnedo te hizo pasarlo muy mal y estar mucho tiempo sin poder torear. Hasta te dijeron que no ibas a volver a la cara del toro. Después, llegó la pandemia. ¿Se te pasó por la cabeza desistir?

El percance de Arnedo en el Zapato de Oro en 2019 con el novillo de Partido de Resina fue muy duro y es algo que va a marcar siempre mi vida. Fueron muchos los mensajes de apoyo y de aliento, de profesionales y aficionados que me llenaron de grandeza. Uno lucha mucho por el toreo y no se da cuenta de que a base de sacrificio y cornadas te vas ganando el respeto de los profesionales. En las redes sociales, todo el mundo se volcó conmigo y eso hizo mucho. Pero fue muy duro, me tiré dos meses y medio en el hospital sin poder salir de la cama, otros dos meses en silla de ruedas y otros dos meses en muleta hasta que fui tirando hacia delante. El primer mes vinieron ocho médicos a la habitación y me dijeron que ya no iba a poder torear más y eso me hizo decaer mucho en el ánimo, pero cuando vi que podía ponerme de pie dije que tenía que tirar hacia delante como fuera. Con mucho esfuerzo físico y mental, puedo estar aquí.

«Si antes del percance me llegan a decir lo que me iba a pasar hubiera blandeado, pero una vez que te pasa tienes que tirar hacia delante. No queda otra porque es tu vida y así tiene que ser. Somos toreros».

¿Qué tenéis los toreros para superar percances como éstos y volver a la cara del toro? ¿Cómo explicamos eso a la gente de a pie?

La fuerza de superación, el sacrificio y las ganas de llegar a ser figura del toreo y no caer en la batalla son claves. Si antes del percance a mí me llegan a decir lo que me iba a pasar, quizá hubiera blandeado, pero una vez que te pasa, tienes que sacudirte el polvo, levantarte y tirar hacia delante. No queda otra porque es tu vida, es por lo que he luchado y así tiene que ser. Somos toreros.

Pudiste reaparecer de tu gran cogida en Arnedo este invierno en México, una tierra que te acogió y en la que viviste durante unos meses toreando mucho en el campo. ¿Cómo ha sido esta experiencia?

En México, los Adame me han ayudado mucho porque me fui para nueve días y me he quedado seis meses. He toreado mucho y me han ayudado mucho tanto profesional como personalmente. Cuando me fui no podía ni correr de los dolores y vine para acá toreando y habiendo evolucionado como torero y como persona.

Antes del percance, tu trayectoria como novillero había sido muy interesante. Ganador del Zapato de Plata en Arnedo, triunfos en Madrid…

Mis inicios fueron muy buenos de la mano de Víctor Barrio. Gané la mayoría de los certámenes en 2013 y 2014, me proclamaron novillero triunfador del año en 2014 y fueron momentos muy bonitos. Llegué al debut con caballos muy preparado. En Madrid ya como novillero con caballos pude cortar una oreja y vinieron plazas importantes. Luego llegó el parón y el año 2019, cuando fui a Madrid y después el percance de Arnedo…

La meta de ser torero ya está cumplida. ¿Cuál es el siguiente reto que se propone Daniel Menés?

Mi meta es ser figura del toreo y eso no se consigue pronto. Mi primer paso es pasar por Madrid y para ello tengo que tener más visibilidad como matador de toros. Ya tengo algunas cositas en México, en Perú, en España… La idea es seguir toreando como matador y cuando me vea preparado, poder tocar las puertas de Madrid y poder confirmar allí.

«No tengo miedo al parón, es mejor estar parado como matador que como novillero»

¿Tienes miedo a que después de la alternativa venga el tan temido parón y el banquillo?

No tengo miedo, es mejor estar parado de matador de toros que de novillero. Creo que puedo tener más oportunidades de torero porque de novillero ya las he tenido y ahora hay que mirar hacia delante porque hay cosas muy bonitas. A parte de la alternativa, tengo preparadas algunas cosas más y ojalá el parón sea corto.

¿Cómo ves la situación de la fiesta? ¿Crees que se recuperará?

La situación está complicada, pero veo que hay juventud que se preocupa y se interesa por la tauromaquia. Estamos tocados, como todos los sectores, pero éste más. Este sector sobrevive de la taquilla y hoy en día con la situación que atravesamos es bastante complicado. Pero vendrán tiempos mejores, estoy seguro. Dios aprieta, pero no ahoga. Este año han sido muchos los pueblos que han dado toros, incluso en algunos lugares en los que no había toros años anteriores y eso tiene mucha importancia.

Y la última, un deseo para el día 15…

Mi deseo se va a cumplir, que era tomar la alternativa, y si tengo que pedir otro es que salgan las cosas bien, que sea una gran tarde y podamos salir a hombros, que el aficionado disfrute y se quede con ganas de verme y que los empresarios vean que me tienen que dar más oportunidades.