Diego Ventura, como gran parte de sus compañeros del escalafón, ha dado por finalizada su temporada de 2022. El rejoneador afincado en la Puebla del Río se mostraba «contento y satisfecho» por todo lo conseguido este año hace unos días en una carta publicada a través de las redes sociales, pero también sacaba a relucir varias ‘espinas’ sobre hechos ocurridos en 2022. «Hoy quiero agradecer públicamente a todo mi equipo por todo lo bonito que hemos vivido en esta increíble temporada de 2022: sin ellos todo hubiera sido imposible», exponía el caballero.
Un rejoneador que es consciente de todo lo vivido dentro y fuera de la plaza: «Agradecer muy especialmente a mi apoderado Andrés Caballero por hacer realidad mi sueño de torear la mejor temporada de mi vida! Han sido 50 corridas de toros llenas de felicidad. Hemos apostado y hemos disfrutado de una gran variedad de encastes para así cumplir con mi propósito de darle al público lo que el público pedía», decía Diego Ventura.
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Sabe quién ha estado a su lado todo este tiempo, esos que son sus pilares donde se apoya cuando las cosas no salen, esos que son su apoyo incondicional: «Gracias a mi familia por estar siempre apoyando en todo momento! En especial, a mi mujer y a mis hijos que saben llevar los momentos difíciles de una temporada de una figura y arroparme y darme siempre lo que más necesito en cada momento».
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La autocritica en un año tan importante también es de alabar, cuando esta está fundamentada únicamente puede servir como acicate: «Hubo cosas que mejorar, por supuesto. Y también sitios donde no estuve por falta de entendimiento o porque no supieron entender y respetar a una persona que se deja la piel día en la plaza y en cada entrenamiento desde la máxima entrega a mi profesión«
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En él debe de una temporada tan redonda del rejoneador portugués hay dos plazas en las que no pudo estar, dos cosos que siente como suyos por los triunfos cosechados en ellos durante todas estas temporadas:«Eché mucho de menos a Sevilla y a Madrid, las extrañé de verdad, pero la vida siempre pone todo en su sitio…»
Ahora tras finalizar la temporada Ventura pone sus miras en la américa taurina, esa que también queda recogida en su carta de agradecimiento. «Insisto que ha sido la temporada soñada, de una felicidad plena, cargada de momentos y de emociones inolvidables, y que hoy despido con estas palabras hasta que llegue el momento de encontrarme con mi querido México al que ya espero con ansias».
«Y gracias, Zaragoza, por hacerme sentir otra vez el hombre más feliz del mundo. Hoy quiso Dios poner en mi camino dos toros que permitieron que saliera la magia de Ventura. De corazón, ¡hasta siempre afición!».
Ahora queda descansar, desconectar para afrontar lo que resta de año en la mejor forma posible. América está a la vuelta de la esquina y su afición quiere disfrutar de un Ventura en su máxima plenitud. Tras una campaña europea muy exitosa, Diego cruzará el charco con la firme intención de seguir conquistando a la afición.
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