La plaza de toros de El Bibio de Gijón permanecerá cerrada hasta nuevo aviso. Según ha adelantado El Comercio este martes, el informe técnico del coso gijonés, encargado por el Ayuntamiento a un estudio de ingeniería privado, sostiene que «existe riesgo de hundimientos en los tendidos de la plaza».» Concluye que el motivo principal de estos hundimientos «son las filtraciones de agua al terreno sobre el que se asientan las piedras que hacen de asiento, que con el paso de los años ha perdido resistenci»a. Los cuatro ensayos de penetración descubrieron «que el relleno de los tendidos presenta zonas huecas y de muy baja resistencia».
«Con los datos de los ensayos de penetración realizados no se puede asegurar que no vaya a producirse un asentamiento instantáneo con el uso de las gradas. Esto no quiere decir que el terreno bajo los tendidos se vaya a hundir en general, pero sí que se pueden producir hundimientos localizados que pueden provocar situaciones de pánico», puede leerse en las conclusiones del informe.
Comienza ahora un largo periodo de confección y puesta en marcha del proyecto de remodelación de la plaza de toros. Un plan «aún por definir» y que el concejal de Obras Públicas y Mantenimiento, Olmo Ron, asegura que «no puedo aventurar cuanto durará», señala a El Comercio.
Después de que la alcaldesa decidiese que la ciudad se quedase sin toros en verano y de ver las pretensiones de la tauromaquia de organizar festejos fuera del tiempo estival -dada que era la excusa de la primera edil para que no hubiese festejos-, ahora ha puesto una nueva traba para impedir que se celebren corridas en el emblemático coso norteño.
