El anuncio por parte de la Casa Matilla de los carteles oficiales de Granada ha traído, además, un detalle que ha pasado desapercibido por la creciente ola de carteles que se están haciendo públicos en estas fechas. Sin embargo, a nadie se le escapa que el regreso de Talavante a la ‘pomada’ y a las grandes ferias supone también un reencuentro con su ex apoderado, Toño Matilla, con quien se rompió el vínculo profesional de forma bastante abrupta.
Por aquel entonces, mediada la temporada 2018 y concluido San Isidro con Alejandro como triunfador, el torero planteó un incremento de 15.000 euros en los emolumentos que percibía por festejo y el apoderado, viéndose incapaz de defender esa subida en los despachos, puso punto y final a la relación profesional. El repentino descenso en las contrataciones del extremeño -que sólo toreó 16 festejos después de San Isidro, y se quedó fuera de la mayoría de las grandes ferias- levantó la polémica en el sector, dado que muchos vieron la mano del apoderado charro en la falta de fechas de Alejandro.
De hecho, la participación de Talavante hace unas semanas en los coloquios de la Asociación El Toro de Madrid dejó una frase lapiadria al respecto. Preguntado sobre el particular, Alejandro aseguró que hoy en día «él me hizo un favor al romper la relación, porque en este momento tengo más interés que entonces», lo que dejaba un poso de requemor a ojos del aficionado entre torero y apoderado/empresario.
La contratación de Alejandro para Granada -igual que para la mayoría de las grandes ferias, que cuentan con el extremeño en su regreso a los ruedos- cuenta una historia distinta de la que levantó tanta polvareda en 2018 que incluso el propio Matilla, hombre poco dado a los primeros planos, decidió salir al paso de las acusaciones con un comunicado en el que desmentía rotundamente las informaciones en ese sentido.
Para echar aún más leña al fuego generado entonces por dos de los personajes más influyentes en el mundo del toro, un artículo firmado por Javier Negre en el diario El Mundo tildaba a Antonio García Jiménez de ‘Maquiavelo del toro‘, un remoquete que se apoyaba en las presuntas maniobras oscuras del empresario y apoderado charro, que no dudó en salir al paso de una bola que se hacía ya demasiado grande.
Lo cierto es que el próximo 18 de junio Alejandro Talavante tomará parte en el tercer festejo de abono de la Feria del Corpus, acompañado de El Juli y Tomás Rufo y con un encierro de Domingo Hernández esperando en los chiqueros de la Monumental Frascuelo. Será el reencuentro en la contratación de dos elementos condenados a entenderse en este intrincado mundo del toro.
Y aún quedan Ferias del apoderado y empresario por anunciar: en Castellón Talavante no ha estado presente por retrasar hasta San Isidro su reaparición española y el pasado viernes se hicieron públicos los carteles de un San Pedro Regalado pucelano sin Talavante, pero aún quedan los de septiembre en el Coso del Paseo de Zorrilla, también gestionado por la Casa Matilla; además, también regentan otros cosos como Jerez de la Frontera -que aún no ha oficializado unos carteles en los que toreará tres tardes Morante- o León.
