EL TENDIDO DE LOS SASTRES

¡Esto es la Fiesta!


lunes 23 mayo, 2022

Manuel Diosleguarde, Jorge Martínez y Álvaro Alarcón, con las reses de Fuente Ymbro, han brindado una tarde para la ilusión en Madrid.

Alvaro Alarcon Ok
Álvaro Alarcón en Las Ventas. © Pablo Ramos

Cuarenta años después, como aquella tarde del 82 con Ruiz Miguel, Esplá y Palomar con los «victorinos«, he vuelto a gritar (desde el sofá de casa, no in situ como entonces) ¡Esto es la Fiesta!

Ha sido una novillada, sí, pero la trascendencia se deriva de la dimensión que novillos y novilleros han sabido dar y que ojalá sirva para devolver a las novilladas el rango y relevancia que deben tener, entre otras cosas porque sin ellas no hay futuro.

Tres chavales, Manuel Diosleguarde, Jorge Martínez y Álvaro Alarcón, con las reses de Fuente Ymbro, han brindado una tarde para la ilusión, pese a tanto agorero de fuera y de dentro.Se cortaron orejas, sí (una más debió sumar Jorge Martínez si el usía no se hubiera puesto ridículamente estupendo), un novillo se llevó los honores del pañuelo azul y Álvaro Alarcón salió en volandas por la puerta de la gloria.

Pero siendo todo ello tan justo como digno de alabanza, lo trascendente viene de la mano de la magnitud de lo acontecido: nada menos que el toreo, ejecutado con entrega absoluta y en divina forma cuando la ocasión fue propicia, a lo que contribuyeron los encastados ejemplares de Ricardo Gallardo.Tres tauromaquias distintas e idéntica determinación, ilusión, entrega y capacidad. Tres novilleros, tres chavales, que afrontan la vida apostando todo en el envite del arte del toreo, a veces tan ingrato.

Pero si de gratitud se trata, vaya desde aquí la de quien esto firma y, de nuevo, grita -por lo bajini pero con toda el alma- ¡esto es la Fiesta!