Una vez desveladas las cartas con la actuación de José Tomás en Jaén, el aficionado se ha puesto a cavilar sobre cuáles pueden ser los hierros escogidos por José Tomás en Alicante. En Jaén la elección no le salió como esperaba, los toros de Victoriano del Río, Álvaro Núñez y Juan Pedro Domecq no estuvieron a la altura de lo esperado, de ahí que el torero de Galapagar le pueda dar una vuelta de tuerca a su elección.
Peinar el campo bravo es importante y más cuando su gran conocedor hace tiempo que nos dejó. Joaquín Ramos era un minucioso estudioso de las reatas, conocía su evolución en toros casi día a día, algo que sin duda le ayudaba a dar en la diana. Su apuesta era casi siempre a caballo ganador, si disparaba era porque sabía que iba a dar en el blanco, pero todo eso ya quedó atrás, teniendo que confiar José Tomás en otro hombre de campo. Joaquín tenía en la cabeza toda la genética del campo bravo y tentáculos en cada festejo que se lidiaba para saber cómo iba evolucionando la progenie de un toro.
Como contaba nuestro director hace unos días, «en la primera corrida de toros en la que falta el veedor es precisamente el toro el que falla en el ruedo«, y eso hizo que saltaran las alarmas. Ahora con calma y prudencia hay que volver a peinar el campo bravo y buscar ahí donde José Tomás encontró siempre ese toro que consiguió en muchas ocasiones ver su mejor versión. Hierros hay, y de contrastada calidad, ahora toca mover los hilos para encontrar esas reatas que Joaquín tenía en la cabeza. Hierros como los de El Pilar, Garcigrande, Núñez del Cuvillo, Victoriano del Río, Jandilla o Domingo Hernández siempre han sido de su agrado, por lo que no habría que descartar que acudiese a dichas casas ganaderas.
Ahora queda esperar para conocer por donde respira el madrileño, si decide apostar nuevamente por estos hierros o busca variar y decidirse por otras casas ganaderas. Victoriano del Río siempre ha sido de su máxima confianza, por lo que no sería nada descabellado que acudiese a Guadalix de la Sierra para buscar ese toro que le ayude a convencer a los escépticos y a mantener en el barco a los seguidores. Si nos guiamos por su último paso por Alicante allí estuvo anunciado con la divisa gaditana de Núñez del Cuvillo, saliendo a hombros y dejando su huella en la arena alicantina; si algo funciona, para qué cambiarlo, pensarán algunos.
De momento el silencio impera, nadie sabe por dónde pueden ir los tiros, sabemos poco o nada sobre su decisión, ¿Apostará por divisas en buen momento como Algarra o La Palmosilla? ¿Buscará la seguridad que le dan los hierros de primera fila? ¿Apostará por el hierro de Parladé con los últimos toros que quedan el Lo Álvaro? Lo que si está claro es que el propio José Tomás sabe que no puede fallar en esta bala, que lo pasado en Jaén no sería bueno repetirlo. Esta vuelta a modo de cantante de Rock pone sobre su espalda una presión extra, es lo que tiene la exclusividad y las apariciones fugaces, que todo el que va espera que aquello cumpla sus expectativas.
Ahora que queda algo más de un mes y con el verano a la vuelta de la esquina el aficionado aparcará el fenómeno José Tomás para disfrutar de una feria de Hogueras que sobre el papel se presenta más que interesante. Esa organizada por una empresa que le ha dado cabida tanto a figuras como jóvenes incipientes. Mientras tanto el de Galapagar seguirá preparándose en el campo, buscando encontrarle el punto óptimo a su toreo, y por qué no, soñando con esas embestidas que lo vuelvan a colocar en los altares del toreo.