ENCIERROS

Este joven que incumple una norma básica del encierro de Pamplona se lleva esta importante ‘lección’ de un pastor


miércoles 13 julio, 2022

Un corredor cita a un toro del encierro de Cebada Gago en Pamplona y uno de los pastores le 'recuerda' con su vara que es algo que no debe hacerse durante el desarrollo de éste.

Pastor Encierro
Momento en el que el pastor reprocha al joven su actitud. © Twitter

La afición taurina conoce -corra o no el encierro- que existen unos códigos básicos dentro de estos festejos populares, una serie de normas entre corredores que no se deben incumplir respeto al toro. Si antes de los encierros la Policía hace controles para evitar que personas ebrias accedan al recorrido del encierro, también en éste se ha de participar libre de objetos que entorpezcan la carrera, incluidas mochilas, cámaras, teléfonos móviles… Todo ello es para preservar la seguridad de aquellos que sí cumplen las normas.

Una vez pasado ese filtro, y con los corredores esperando el comienzo del encierro, aquellos que van a realizarlo deben saber también que el toro es sagrado. Y entre esos códigos no escritos entre corredores para el buen desarrollo del encierro también hay normas recogidas en las ordenanzas del propio encierro. De saltarse éstas, el mozo puede enfrentarse a una dura sanción económica.

Uno de los pastores da un ‘varazo’ al corredor

Raro es el día en el que algún corredor no comete la imprudencia de coger los pitones o acariciar el lomo del toro de lidia y eso es precisamente lo que ocurrió el pasado lunes y que recoge este vídeo en Twitter. Un corredor cita a uno de los astados, algo no permitido, recibiendo un tremendo varazo por parte de uno de los pastores que corren tras los toros. Este corredor se saltó a la torera esta norma básica del encierro, recibiendo su correspondiente correctivo, no siendo descartable una multa ejemplarizaste para evitar que se vuelva a repetir.

Según publicaron nuestros compañeros de ABC, ya en 2019 un joven de 26 años, natural de Valencia, fue sancionado por un doble incumplimiento de la ordenanza del encierro en dos días diferentes imponiéndosele dos sanciones, una de 1.000 euros por agarrar al toro el día 10 de julio y otra de 3.000 euros, por reincidir en su conducta el día 12. Esto no solo es un peligro para él, sino para los corredores de alrededor y, sobre todo, para los toreros que luego se tienen que jugar la vida delante del bravo en la corrida vespertina, que al fin y al cabo es el fin de su crianza.

Gracias a las fotografías y las imágenes emitidas tanto en televisión como en redes sociales se consigue dar con el imprudente y sancionarlo. Estas imágenes que vemos en la publicación seguramente ya estarán en manos de la policía, que de encontrar al corredor le hará saber que está propuesto para sanción por saltarse la ordenanza del encierro. En Pamplona lo primero es el respeto al toro.