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La otra perspectiva de cómo el caballo de picar tiró a Manuel Quinta y rompió las tablas a la carrera en La Glorieta


miércoles 21 septiembre, 2022

El uso del peto dentro de los espectáculos taurinos se remonta al primer tercio del siglo XX, ahí se determina el uso de protecciones para los caballos que participen en el transcurso de la lidia.

Picador
El picador descabalgado. © Miguel Hernández

El siguiente hecho ocurrió el pasado domingo en La Glorieta cuando un caballo de picar se desbocaba, tiraba al picador al suelo y huía despavorido por el ruedo. Debido a que el animal llevaba vendados los ojos y tapadas las orejas, no sabía donde se encontraba, dándose de bruces contra las tablas.

Tras chocar con estas el pese del caballo las partió, quedando inmóvil en el callejón de la plaza. Como es lógico los aficionados, sorprendidos con todo esto, dejaron de estar pendiente de la lidia y se centraron en ver si el animal estaba recuperado del golpe, algo que por suerte fue así.

Tanto los operarios de la plaza como los miembros de la cuadra de picar, así como algún picador acudieron rápidamente al lugar donde estaba caído el animal, viendo que todo estaba en orden se prosiguió la lidia del astado de Cuvillo sin ningún tipo de problema.

Hay que recordar que los caballos están perfectamente protegidos por un peto que cubre casi la totalidad del animal y que evita que el toro cornee al animal. El uso del peto dentro de los espectáculos taurinos se remonta al primer tercio del siglo XX, ahí se determina el uso de protecciones para los caballos que participen en el transcurso de la lidia.

Con los años el peto fue evolucionando en pro de la defensa del animal, sin ir más lejos el reglamento taurino nacional, aprobado por el Ministerio del Interior de España en 1996, recoge en el artículo 65 las particularidades que deben tener las protecciones de las cuadras de picar durante su intervención en espectáculos taurinos.

«Rebote del caballo de picar montado por Manuel Quinta, ayer en Salamanca. Ahí se ve la fuerza que tiene un caballo» escribía en redes sociales ‘La Esencia del Toreo’, un vídeo que se hizo viral, el cual ya cuente con más de 36.000 reproducciones, 175 Retweets, 847 Me gusta y 20 Tweets citados en menos de cuatro días, algo que deja entrever el poder de difusión de la tauromaquia.