CAMPO BRAVO

José Antonio Alonso, nuevo propietario de la ganadería de Luis Terrón: así son sus 5 corridas para 2023


martes 17 enero, 2023

Conocemos el nuevo proyecto de un ganadero que tiene en 'Peñas Blancas' un tesoro genético de incalculable valor: adquirió antes de la pandemia la ganadería -no el hierro- de Luis Terrón y prepara cinco corridas para 2023.

Jose Antonio Alonso Luis Terron
José Antonio Alonso, nuevo propietario de gran parte de la ganadería de Luis Terrón. © Pablo Ramos

Hablar de la ganadería de Luis Terrón es hacerlo de una de las divisas más importantes de Extremadura. Es una ganadería de sangre Murube que llegó a codearse con las más prestigiosas y a copar lugares importantes dentro de las ferias, un hierro que pedían las máximas figuras del toreo para sus tardes más importantes del año. A la muerte de Terrón en 2014, la ganadería siguió pastando en la localidad pacense de Los Fresnos, haciéndose cargo de ésta su sobrino.

Tras ponerla en venta, fue adquirida en 2019 por osé Antonio Alonso Molano, llevándose todo el ganado que había en la finca hacia tierras de Mérida, concretamente a la finca ‘Peñas Blancas’, zona de la que tomó nombre la otra ganadería que posee de Sangre Torrestrella-Marqués de Domecq. Una ganadería con mucha historia, ya que perteneció en su momento a D. Ramón Sánchez de Ybargüen.

Ahora José Antonio se hace en propiedad con un trocito de pasado, una ganadería con gran solera y una base genética muy definida. Los «murubes» de Terrón dan un nuevo paso con la creación de este nuevo proyecto ganadero que llevará el nombre de su actual propietario. Por todo ello queríamos hablar con él, saber sus inquietudes, los objetivos marcados a corto y medio plazo, así como la preparación de un 2023 ilusionante para la casa.

La finca ‘Peñas Blancas’, paraíso «murubeño» de los antiguos toros de Luis Terrón

Terron
Dos toros de Alonso, antes Luis Terrón. © Pablo Ramos

Las lluvias de este invierno le han dado un salto de calidad a la finca ‘Peñas Blancas’, una dehesa extrema situada en el término municipal de Mérida. Allí desde 2019 conviven varias sangres que se llevan por separado: «En 2014 compré la ganadería de Sánchez de Ybargüen, la cual potencié con varios toros de la misma línea Marqués-Torrestrella, más tarde amplié la ganadería con la totalidad de las reses del hierro de ‘La Mimbrera’, procedencia ‘Cebada Gago’ la cual llevamos por separado. Por último, en 2019 me animé y adquirí la ganadería de Luis Terrón, la cual también llevamos por separado. Tres líneas para dos proyectos ganaderos», explica Alonso.

Una adquisición que no ha salido a la luz hasta esta fecha: «Todo fue muy rápido. Un amigo me llamó y me dijo que se vendía. Me sorprendió al inicio y no me lo pensé. Fuimos a ver la ganadería y me encantó. Además, como tengo mucha afición al caballo, había visto corridas de toros de Luis. Se lo compré con mucha ilusión y seguimos manteniéndola, hasta este año que tenemos una parte de los toros de saca».

Una pandemia que les pilló con la compra reciente, algo que les ayudó a empaparse de la ganadería y a meter en la plaza a un número importante de animales: «Nos sirvió para ahondar en la ganadería y valorar los tentaderos de hembras. Es una ganadería con un fondo de nobleza muy bueno, evidentemente nosotros le daremos nuestro toque, pero sin salirnos de ese tipo de toro que tan buen resultado le dio a sus anteriores propietarios».

36 toros de esta rama Murube para 2023

Alonso Terron
Un toro «murubeño» de Terrón, ahora en manos de Alonso. © Pablo Ramos

Un 2023 donde debutará como ganadero en este nuevo camino, una temporada donde José Antonio Alonso entrará de lleno en el mercado de las corridas de rejones, esas donde la sangre Murube está muy cotizada: «Tengo 36 toros, pero por las bajas que siempre suceden, serán para sacar cinco corridas de toros. Es una camada no muy larga, es la primera que voy a lidiar, por lo que el número creo que es el idóneo».

Una ganadería muy sentada, la cual tenía muy definido el camino a seguir. Una piara de vacas y una serie de sementales que aún continúan en esta nueva casa: «Tenemos 130 vacas en la parte de Murube y 140 en Peñas Blancas, aunque hemos reducido. Yo le compré al sobrino de Luis 178 vacas, y entre algunas que he quitado y algunas viejas, se han quedado en 130 vacas madres, más las eralas que he aprobado en la tienta. Aquí hay un total de unas 270 vacas, animal arriba, animal abajo de los dos hierros».

Un ganadero paciente y con los pies en el suelo, sabe que el proyecto que tiene en sus manos es muy interesante, pero no quiere correr, por eso descarta -de momento- su presencia en plazas de exigencia a medio y corto plazo: «Mi intención ahora es mantenerme y lidiar en sitios bonitos y de disfrute. Con eso me doy por satisfecho, ya llegarán tardes de mayor responsabilidad, todo a su tiempo«.

FOTOGALERÍA: PABLO RAMOS