CAMPO BRAVO

Graban cómo el mayoral de Partido de Resina se la juega a caballo ante un peligroso semental ‘solitario’


viernes 27 enero, 2023

Todo sucedió cuando se intentaba sacar a un semental de Partido de Resina de su cercado para llevarlo a los corrales, ya que era época de saneamiento y los lotes de vacas como debían cumplir con las normas dictadas desde Europa.

Partido Resina Toro
Un toro de Partido de Resina y un momento del reportaje. © J. J. Diago

Una de las ganaderías más legendarias del campo bravo es la sevillana de Partido de Resina -antes Pablo Romero-, una divisa que pasta en las tierras del municipio sevillano de Aznalcázar, a muy pocos kilómetros de Villamanrique de la Condesa. Allí desde hace unos años está como mayoral Joaquín Morera, un joven del pueblo que tras la jubilación de Manuel Muñoz tomó el testigo del trabajo diario con el ganado bravo de la casa.

Joaquín conoce a cada animal de la ganadería, sabe de sus reacciones, por ello se muestra prudente cuando toca manejar a ciertos animales; eso sí, siempre buscando la manera de que estos no se salgan con la suya, por eso hay que hacer las cosas con tranquilidad y sin molestar en demasía a estos animales. Uno de esos toros complicados de manejar es uno de los sementales de la casa, es época de saneamiento y hay que mover a un gran número de animales camino de los corrales.

Las cámaras del programa Toros para Todos, que dirige y presenta el periodista Enrique Romero, estuvieron presentes ese días en la mítica finca sevillana. Todo se hace a horas muy tempranas para evitar las horas de más calor, todo en favor de unos animales que podrían acusar los más de 40 grados que se suelen dar a media mañana. Es una época complicada, pero estas labores mandan, de ahí que en la casa sean conscientes del papel que ellos juegan en todo esto. Aprovechando el saneamiento se quitará al semental de su lote de vacas, ya es verano y es momento de dejarlos descansar.

Pero el problema vino con el semental que estaba junto a la piara de vacas; éste no quería abandonar su cercado, tenía allí su querencia, obligando al mayoral y los vaqueros a jugarse el tipo para tirar de él hasta conseguir llevarlo a corrales. El toro presenta batalla, es imprevisible, y ahora toca ver la pericia de vaqueros y mayoral y el valor de los caballos. Son momentos de tensión, pero poco a poco dejándole su espacio, el animal se orienta de donde está y hacia donde debe ir.

Por la fuerza nunca se consigue nada delante de un animal bravo y todo hay que hacerlo usando la cabeza e intentando engañar al animal para que crea que va donde él quiere ir y no donde le mandan los hombres de campo. Joaquín, el mayoral de Partido de Resina y su caballo, se juegan el tipo, ya que hay que llegarle mucho a un animal que se vuelve imprevisible. Huele a otro hato de vacas pese a estar fuera del cercado y no quiere abandonarlo.

Poco a poco va tomando las puertas, pero el problema puede volver a repetirse cuando llegue a un cercado más amplio. Sabiendo todo esto, allí le espera su lote de vacas y la parada de cabestros, fundamentales en el quehacer diario de la ganadería. Pero se ha vuelto a quedar rezagado: las vacas ya andan en los corrales y el animal no quiere ir por donde le mandan; el semental va contra querencia y así es muy complicado.

Gracias a la labor nuevamente de los cabestros se consiguió llevar al semental de Partido de Resina a los corrales, allí el peligro seguía siendo latente, y el animal podía matarse contra una puerta, por ello había que calmarlo. Para ello era crucial el agua, algo que le aliviaba del calor y le bajaba las pulsaciones. Poco a poco y con el paso de los minutos se pudo meter en el mueco y sanearlo sin problema, volviendo ahora a un cercado junto a sus hermanos, esperando al mes de noviembre para volver con las vacas.