Los tiempos en una explotación de bravo son fundamentales y saber cuándo poner o quitar un toro de las vacas es clave para un ganadero, unas fechas que debe seguir a rajatabla para tener una organización de aquello que es realmente importante en la finca.
El siguiente vídeo, filmado años atrás, sucede en el momento en el que se va quedando atrás la primavera para entrar de lleno en el verano. En la grabación se ve cómo el mes de julio se acerca y con ello los toros vuelven a su cercado para dejar a las vacas con sus becerros y que éstos pasen el verano en la rastrojera que los ganaderos les tienen reservados en una de las praderas de Jandilla, finca donde pastan los toros de Lagunajanda, en la provincia de Cádiz.
En la grabación se ve cómo toca sacar al toro del lote de vacas con el que ha convivido durante mucho tiempo. ‘Fustado’, el semental de este hierro gaditano, abandona el lote de hembras y se reúne con el grupo de sementales junto a la plaza de tientas. Por suerte no ha dado demasiados quebraderos al ganadero y ha tomado bien los bueyes; ahora ya está en los corrales y es el momento de devolverlo junto al resto de sus hermanos, una época de descanso para él antes de volver en octubre nuevamente con las hembras cuando acabe la temporada y comience el otoño.
Pero existe un problema: al venir de estar con las vacas, este semental desprende un olor que hace que el resto de sus hermanos quieran ‘montarlo’. Para evitar lesiones y posibles peleas, Diego, el mayoral de Lagunajanda, tiene un secreto con el fin de que no tenga problemas a la hora de estar con el resto de sementales. Al llegar es conducido hasta la mangá para desparasitarlo y quitarle el olor a vaca. El mayoral añade zotal al agua para limpiar el lomo del toro: «Ya está el tío bañao», exclama el profesional en el vídeo. «Es importante suavizar el aroma de hembra para no seducir al resto de los sementales. Si lo montan pueden llegar a lastimarlo. Gracias a este producto durante unos días no tendrá olor a vacas», añade.
Ahora este noble y bravo semental tendrá que recuperar los kilos perdidos durante los meses de cubrición -de 40 a 60 aproximadamente-; para ello se le prepara un pienso especial que ayude a ganar lo perdido durante el periodo de monta. ’Fustado’ es de esos toros estrella de la casa, un semental que se ganó el derecho a padrear en una ganadería tan señera como ésta. Su sangre de Salvador Domecq es la mejor tarjeta de presentación posible.