En el campo bravo madrileño pasta una de las ganaderías más especiales que hay en nuestra piel de toro: a orillas del Río Tajo —en las cercanías de municipio de Fuentidueña de Tajo— está la finca Bellalucía. Se trata de una explotación da cobijo a unas 120 vacas de vientre y cuyo ganadero es Julián Gómez Carpio, recortador, banderillero y empresario y ganadero. Una ganadería que ya conocimos en el pasado que ahora volvemos a recordar.
Dentro de esta explotación existen dos hierros, el primero bajo el nombre de Bellalucía, el cual está compuesto por animales de Núñez del Cuvillo y Laurentino Carrascosa, llevándose ambas sangres por separado. El segundo es el de Caras Blancas de Carpio formado con vacas y sementales de D. Giménez Indarte, procedencia Marqués de Villamarta, “Murube-Urquijo” y “Ganadería Marqués de Domecq”. Unas sangres que posteriormente se cruzarían con vacas de El Freixo para acabar de cerrar el círculo.
Durante la pandemia surgieron diversas iniciativas relacionadas con el toro bravo, una de ellas llevaba por nombre ‘Apadrina un becerro’, que estaba orientada a la protección de los nuevos nacimientos de los becerros de la casa. Con una aportación económica, el aficionado podía ayudar a mantener a un animal en concreto, poner su granito de arena para la sostenibilidad de la ganadería y la conservación del medio natural.
El apadrinamiento consiste en ofrecer una aportación anual y seguir desde su nacimiento, crecimiento, bautismo a fuego y tienta (en el caso de las hembras) hasta su lidia (en el caso de los machos). También el padrino tenía sería el encargado de poner nombre al animal, visitarlo en exclusiva dos veces al año y conocer a sus progenitores y hermanos. También sería el encargado de marcarlo a fuego y asistir a posterior tienta en el caso de ser hembra y estar informado del día y festejo de su lidia en el caso de ser un macho.
Uno de esos becerros que se podía apadrinar fue subido a la cuenta de TikTok de esta iniciativa, un vídeo donde el pequeño andaba encamado junto a una de las alambradas. Tras percatarse de la existencia del ganadero, la curiosidad le pudo hasta que llegó su madre para llamarle la atención. Se trataba de una vaca de enorme seriedad y con el mismo pelaje que este precioso animal que contaba únicamente con unos días de vida.
Una vez que el becerro se encontraba junto a su madre, ésta no quitaba ojo a aquello que ocurría en la cerca contigua, haciendo claros gestos de disconformidad y dejando a las claras que no le gustaba esa presencia tan cerca de su becerro. Engallada y con la mirada en el objetivo, esta vaca infundía respeto. Pese alejarse del vallado, se volvía, no quitaba ojo de los que desde allí la grababan junto a su retoño.
@apadrinaunbecerro ¿Qué os parece Neblino?😉#carasblancas #bellalucia #elcarpio #toros #torobravo #ganaderia #campo #apadrinaunbecerro #carasblancasdecarpio #apadrina #tauromaquiaescultura #bull #spain #festejo #torosbravos #tauromaquia #becerro #toro #apadrinamiento #elfreixo ♬ ¡Que Bonito! – Rosario
