El toro bravo siempre defiende su territorio en el campo, imponiéndose, como lo que es, el auténtico rey, dueño y señor de la dehesa. Por eso, al contrario de las predicaciones del animalismo, que en la mayoría de las ocasiones hace gala de su ignorancia en sus exposiciones, jamás debes acercarte a las reses bravas a campo abierto sin estar junto a alguien que los conozca en profundidad. Los vaqueros y mayorales saben de sus reacciones, de sus cambios de humor, por eso ir por libre no es algo recomendable.
Como ya dijimos en alguna ocasión, el campo bravo es un continuo aprendizaje para tos aquellos que conviven con este mítico animal. Pese a su nobleza a campo abierto son astados muy jerárquicos, no aceptando fácilmente las órdenes, por todo ello, en multitud de ocasiones se arrancan sin previo aviso cuando hay que cambiarlos de cercado, llevarlos al corredero o embarcarlos para una plaza en concreto.
El toro bravo es un animal jerárquico, siempre anda pendiente de estar por encima de sus hermanos para dominar el cercado. El cambio de tiempo les pone irascibles, se inquietan y ahí es donde se producen las peleas, muchas veces la muerte. Tampoco aceptan que invadan su territorio, eso es algo que les irrita sobremanera y que puede provocar una reacción por parte de este animal. La llegada de las fundas evitó muchos problemas que hasta esa fecha no tenían solución, ahora al menos, las peleas no siempre acaban con uno de los combatientes muerto en la lona.
En esta ocasión, vemos un vídeo que estuvo muy cerca de acabar mal. Como es habitual en el campo, los veedores entraron en uno de los cercados para ver los animales que iban a reseñar para un festejo en concreto, pero no contaban con que el animal se arrancaría con una fuerza descomunal hacia el 4×4. El toro, sin previo aviso, se arrancó a galope detrás del vehículo; quería sacarlo de allí, no aguantaba que invadieran un territorio que se había ganado un tiempo atrás.
Por eso, el ganadero pisó el acelerador del coche; sabía que esos 200-300 metros con el toro detrás iban a ser complicados, ya que la fuerte arrancada no permitía relajaciones. Afortunadamente, el terreno no estaba mal y el cercado no estaba poblando de grandes arboledas, algo que facilitaba la huida de los que andaban dentro del coche.
Fue un vídeo que fue publicado en las redes sociales acompañado de un texto: «El toro de lidia lo define su bravura. En la plaza o en el campo embiste, es su naturaleza: el combate, la guerra«. Por suerte el toro estaba enfundado, pero el riesgo de desestabilizar al 4×4 o de partirse un pitón estaban ahí, por eso una vez solucionado el problema se decidió abandonar el cercado para calmar a un toro que no estaba dispuesto a ver por su cercado a otros que no fueran sus hermanos de camada.
El toro de lidia lo define su bravura.
En la plaza o en el campo embiste, es su naturaleza: el combate, la guerra. pic.twitter.com/3slOSVz4PW— Omar Montor (@OmarMontor) October 26, 2021