Foto Eduardo Porcuna
Como tradicionalmente, la corrida de la divisa legendaria de Miura, pone colofón a la feria de Sevilla, frente a los astados que pastan en Zahariche se medirán los diestros, Antonio Ferrera, que hace su único paseíllo de la feria en la tarde de hoy y vuelve Manuel Escribano tras su triunfo en su anterior comparecencia en el coso del baratillo, a última hora se conoció la baja del que iba a ser otro integrante del cartel, David Fandila “El Fandi”, que no podrá hacer el paseíllo por una debida a una dolencia lumbar que le impide torear, presentando el correspondiente parte médico a la empresa justificando su ausencia.
Silenciado Ferrera con el orientado primero
No dio ninguna opción el primero de la tarde, un astado de Miura justito de fuerzas que se defendió en el último tercio. Antes había destacado José María González a caballo en un gran tercio de varas, amén de Ángel Otero y Alberto Carrero en banderillas. El de Miura nunca tuvo franqueza en las telas, reponiendo y sabiendo aquello que se dejaba atrás. Toro ligero de cuello este abreplaza, un animal que no dejó a Ferrera correr la mano. Por el izquierdo no tuvo ni uno. Ferrera estuvo en lidiador dejando una última serie con reminiscencias del siglo pasado con muletazos por alto. Le anduvo por la cara antes de machetearlo y dejar una estocada de rápido efecto.
La porfía de Escribana es silenciada ante la díscola movilidad del segundo
Tampoco dio muchas más opciones el alto y agalgado segundo, un animal que se movió en los primeros tercios, pero que llegó soltando mucho la cara a la faena de muleta. Inteligente y hábil anduvo Escribano en un tercio de banderillas donde el animal siempre anduvo midiendo y con la cara por las nubes. Comenzó faena por alto sin someter al animal para más tarde intentar torearlo a derechas. Manuel siempre lo hizo a media altura y en línea recta. Anduvo muy firme el de Gerena con un toro que vino dormidito. Por el izquierdo tendió también a soltar la cara y a reponer. Aguantó coladas y arreones de un animal muy complejo. Inteligente en alturas y distancias para robarle los muletazos que no tenía. Tras pasaportar al animal también fue silenciado.
Ferrera se topa con el reservón e insulso tercero y es silenciado
La tarde tampoco rompió en el tercer capítulo del festejo. En esta ocasión salió por chiqueros un cárdeno girón de imponente lámina, pero vacío por dentro. Un astado en el que vimos a un porfiador Ferrera en su faena muleteril. Antes habían destacado Joao Ferreira y Mambrú en banderillas con tres pares de mérito que le valieron el reconociendo de la plaza. En la muleta le buscó las vueltas por ambos pitones, pero el toro reponía haciendo hilo. Un astado que se defendió, más si cabe por el derecho donde siempre supo lo que se dejó atrás. Le enganchó demasiado la muleta a un torero que no anduvo cómodo ante un toro reservón pero sin maldad. Tras atascarse con los aceros fue silenciado.
Una estocada baja deja en una oreja una importante faena de Escribano al gran ‘Choricero’
En cuarto lugar salió ‘Choricero’ uno de los toros de la feria por bravura y franqueza en sus embestidas. Se fue a portagayola Escribano para dejar una larga de gran mérito y un recibo a la verónica de gran templanza. El de Miura embestía como un obús, siempre por abajo —hasta el embroque— y transmitiendo una barbaridad. Acudió de largo en dos puyazos donde empujó con clase, saliendo ovacionado Manuel Sánchez por su gran labor. En banderillas el de Gerena le buscó las vueltas a un animal que siempre galopó. Escribano apostó por él desde el principio en una primera serie donde intercaló los cambiados por la espalda iniciales con derechazos en redondo de gran templanza. El toro siempre embistió a galope, exigiendo que lo llevarán enganchado por abajo. Cuánto más le apretabas, más se reducía. Por el izquierdo hizo el avión, colocando la cara y yéndose hasta el final. Lo pulseó Manuel en naturales donde el toro la tomó con gran clase y ritmo. ’Choricero’ tuvo la virtud de la fijeza, la prontitud y la humillación. Manuel acertó en llevarlo siempre hasta el final, de no hacerlo se quedaba cortito. Se colocó en el sitio, allí donde la embestida del toro era más agradecida, para cuajar muletazos de gran despaciosidad. La última serie a derechas tan poderosa como templada acabó de conquistar a una plaza que pidió con insistencia el doble trofeo, pero la estocada se fue a los bajos, de ahí que Figueroa no concediera el doble trofeo. Justa ovación para el bravo animal en el arrastre.
Ferrera se topa con un quinto noble pero que acusó sus más de 600 kilos
Ferrera se topó con un quinto animal que acusó el exceso de kilos, un astado con nobleza, pero que llegó muy apagadito al último tercio. El de Miura se dejó pegar en el peto para acudir con nobleza a un tercio de banderillas donde volvió a estar muy entonado Mambrú. Le corrió bien la mano a derechas en una tanda donde nunca le exigió, pero el animal se fue apagando hasta pararse finamente. Por el izquierdo todo lo hizo a media altura y sin emplearse. Le costó moverse a un astado que dejó al extremeño —al menos— poder estar aseado. Tras una gran estocada fue silenciado.
Palmas a la porfía y la fe de Escribano con un sexto muy a menos
Se volvió a ir a portagayola Escribano para recibir a ‘Amargoso’ el último animal de la Feria. El agalgado astado venido de Zahariche acometió con transmisión en unos lances capoteros donde Manuel acertó en templarlo y abrirle los brazos para que no se quedara debajo. Acometió desde la larga distancia al caballo en un tercio de varas donde se enceló con el jaco. Manuel sabía que el triunfo también podía estar en este animal, de ahí que se la jugara en un último par sentado en el estribo, el quiebro por los adentros heló la sangre de los aficionados que estaban sentados en los escaños de La Maestranza. Le dio la larga distancia a un toro que acometió con alegría pero sin continuidad en la primera serie. Le aprovechó inteligentemente el viaje para alargar el muletazo en una nueva serie de gran firmeza. Por el izquierdo se volvió siempre sobre las manos, estando muy ágil y habilidoso el de Gerena para colocarse de cara al siguiente muletazo. Faena en la que acertó en alturas y distancias para sacarle los pocos muletazos que tenía dentro. Una serie a derechas compacta y de mayor ligazón obtuvo la respuesta de una plaza muy con él. Tras pasaportar al animal de una estocada trasera, escuchó una palmas.
FICHA DEL FESTEJO
Plaza de toros Real Maestranza de Caballería, Sevilla, Corrida de Toros. Última de feria. Casi dos tercios de plaza.
Toros de Miura. desiguales de hechuras y comportamiento. De embestidas a la defensiva, el medido de fuerzas primero; de díscola y seca embestida el agalgado segundo; de pasadora embestida el reservón e insulso tercero; de gran entrega y humillación el bravo cuarto ovacionado en el arrastre: apagadito el noble pero pasador quinto; a menos el manejable pero desrazado sexto.
Antonio Ferrera (Grana y Oro con cabos negros): Silencio, Silencio y Silencio
Manuel Escribano (Pizarra y Oro): Silencio, Oreja tras petición y Saludos desde el tercio
INCIDENCIAS: Saludaron Ángel Otero y Alberto Carrero en el primero, así como Joao Ferreira y Mambrú en el tercero.