Un toros de José Vázquez remendaba la corrida de Toros de El Torero esta tarde de viernes en Las Ventas, donde Uceda Leal regresaba a su plaza para abrirle cartel a Morante de la Puebla y con Sebastián Castella, autor de la faena más rotunda de lo que llevávamos de feria. Todo ello ante un nuevo cartel de No Hay Billetes, el octavo que se cuelga en este San Isidro planteado por la empresa Plaza 1.
Uceda logra momentos de buen toreo ante la transmisión del primero, pero lo pincha
De 553 kilos era el ‘Vigilante’ primero de El Torero, un animal serio por delante y con mucha caja. No rompió en las telas ni tampoco en la lidia de Gómez Escorial, dejando un buen par Marcos Ortiz. Al tendido fue el brindis de Uceda, que tuvo que hacerse con la falta de poder del toro en el prólogo de la obra. Pero luego mantuvo la transmisión por ambos lados un toro al que le intentó poder José Ignacio, que logró muletazos estimables, pero la lluvia comenzó a arreciar y fue difícil el fruto final, porque además se atascó con el acero. Silencio.
Tres verónicas de seda pura de Morante y nada más en el segundo capítulo
De seda pura fueron al menos tres de las verónicas que José Antonio recetó al primero de su lote de salida, un Vivaracho negro de 538 kilos que luego fue remiso a entrar al jaco de Aurelio Cruz. Muy suelto en la lidia de Lili, que intentó como pudo sujetar su embestida correosa. Tras probarlo por abajo, tiró por la calle de enmedio y lo despachó de una estocada contraria. Fue silenciado.
Castella batalla contra el viento en una obra al tercero con la clave de los tiempos y corta una oreja
Negro listón bragado corrido llevaba por capa el ‘Pinturero’ tercero, del hierro de José Vázquez, que no se definió ni en el jaco ni en el capote de Viotti, pero empezó a romper en un prólogo de obra por bellos doblones de Sebastián Castella. Por la zurda se la echó en la primera serie, en la que el viento comenzó a molestar, pero trazó con gusto la noblona embestida del de Vázquez. Los tiempos fueron pieza clave de la faena, en la que dejó respirar a un animal más pegajoso por la diestra, pero al que domeñó Sebastián con momentos. De nuevo al natural sacó algún muletazo estimable, pero con el astado ya más venido a menos, pero aún mostrando el animal retazos enclasados. Tras una estocada arriba y efectiva, cortó una oreja con algunas protestas.
Uceda Leal deja bellos instantes de su clásico concepto ante el serísimo cuarto y le corta la oreja
Uceda Leal paseó la oreja del cuarto, un toro noble y duradero y que lucía dos velas de salida. Fue un animal que no rompió en las telas capoteras de inicio y con el que fue ovacionado Niño de Aravaca por sus pares. Se lo llevó a terrenos del cinco Uceda, donde evitó el viento y rascó dos primeras series por la derecha de clásica pureza. Ahí fue ahondando en la embestida de un animal con teclas y al que había que imponerse. Y lo logró José Ignacio también al natural, donde selló buenos instantes de mano baja pero más aislados que con la derecha. El estoconazo final, que fue efectivo, puso en sus manos la oreja.
Morante permite un durísimo tercio de varas al quinto y luego se queda sin toro
‘Remero’ se llamaba el castaño listón quinto, que se llevó un duro tercio de varas mientras que José Antonio no paraba cesar. Las protestas para cambiar el animal no cesaron pero el palco no accedió, entre otras cosas porque el toro no perdió las manos, pero no tenía vida para seguir las telas. Nada pudo hacer José Antonio muleta en mano tras lo creado, despenando al de El Torero sin acierto con el acero. Silencio.
Castella, feísimamente cogido por el sexto, deja una firme actuación pero sin acertar en alturas
De más voluntad que brillo fueron los delantales de Sebastián Castella al ‘Jopillo’ sexto, castaño listón bragado y de 528 kilos al que dejó dos buenas y ovacionadas varas Agustín Romero. Brilló Rafael Viotti en sus pares, ovacionados, ante una siempre certera lidia de José Chacón. Al tendido fue el brindis de Sebastián, que no supo dominar de inicio la cara alta del animal, al que le bajó la mano en todo momento, no acertando en una media altura que hubiese sido la clave para hacerse con el de El Torero. Y en ese momento cogió de forma espeluznante el animal al de Béziers, que se llevó una soberana voltereta en la que resultó herido de gravedad. Y se puso de nuevo con gran verdad a intentar torear el feo derrote que pegaba a mitad de viaje el toro, que de nuevo hizo por cogerlo. Tras despacharlo, sorprendentemente escuchó sólo palmas.
FICHA DEL FESTEJO
Plaza de toros de Las Ventas, Madrid. Vigésimo primera de abono. Corrida de toros. No hay billetes.
Cinco toro de Toros de El Torero y uno de José Vázquez (tercero). Con transmisión por ambos lados un primero al que le faltó la calidad; de correosa embestida de inicio y luego de geniudo embroque el segundo; de noblona embestida la de un tercero con retazos de calidad, pero a menos; serísimo el cuarto, de noble y duradero tranco; sin fuerzas el quinto, que sufrió un durísimo tercio de varas; sin fijeza, con la cara alta y con un feo tornillazo el complicado sexto.
Uceda Leal (nazareno y oro): silencio y oreja.
Morante de la Puebla (corinto y oro): silencio y silencio.
Sebastián Castella (marino y oro): oreja y ovación de despedida.
Parte médico de Sebastián Castella
Herida por asta de toro en cara interna de 1/3 inferior del muslo izquierdo, con dos trayectorias, una ascendente de 20 cm que produce destrozos en músculos vasto interno y recto anterior. Y otra hacia atrás de 15 cm que produce destrozos en músculo vasto interno y que alcanza el fémur.
Bajo anestesia general es intervenido en la enfermería y trasladado a la Clínica Fraternidad Muprespa-Habana.
Pronóstico: Grave
Fdo. Dr. Máximo García Padrós y Dr. Máximo García Leirado
FOTOGALERÍA: LUIS SÁNCHEZ OLMEDO