Se cerraba, este viernes día 14 de julio, la Feria del Toro de Pamplona con la tradicional corrida de Miura a la que se enfrentaban Rubén Pinar, Juan Leal y Jesús Enrique Colombo.
Un valiente Leal, ovacionado tras lidiar por Pinar a un primero que sabía lo que se dejaba atrás
Rubén Pinar fue prendido por el primer toro de la ganadería de Miura, un cárdeno de nombre “Reinasolo”, con el guarismo del 8 y de 615 kilos de peso. Lo cogió en el saludo por la larga cambiada, dándose la vuelta enseguida el animal. La cuadrilla de lidia de Juan Leal se encargó del toro, pero los hombres de plata de Rubén Pinar se hicieron cargo de banderillear al astado. Tras ello, brindó Juan Leal al albaceteño, dejando la montera en la puerta de la enfermería. Faena valiente del de Arles, que la inició cambiándose al toro por la espalda en los medios, y luego se enfrentó a un toro duro y difícil especialmente por el lado izquierdo. Fue construyendo una obra valerosa por ambas manos hasta lograr un arrimón final que llegó arriba.
La raza de Colombo corta una oreja con fuerza del manso segundo de Miura
“Almadreño”, negro entrepelado, número 37, y de 590 kilos era el segundo de la tarde, primero del lote de Jesús Enrique Colombo, al que el venezolano dejó entrega capotera y variedad con una bella serpentina durante el tercio de varas, apostando capa en mano en todo momento. Dio fiesta a las peñas en banderillas, pareando de forma solvente. Al alcalde de sol brindó, coreando el momento las peñas, e inició la obra al hilo de tablas con un astado mansurrón. No hubo tiempos muertos en una obra en la que aguantó la mansedumbre del animal a base de porfía y de entregarse con su particular concepto al toro por ambos lados, destacando algunos derechazos de muy buena factura y los remates de serie. Le dio al tendido alegría, y tras estoquearlo con eficacia, paseó una oreja con fuerza, pidiéndose la segunda pero no otorgándola el palco.
La falta de fuerza del tercero transformada en violencia lastra la entrega de Juan Leal, que da una vuelta tras petición
A portagayola saludó Juan Leal con una buena larga al tercero de Miura, un toro al que, tras las posteriores verónicas, acercó al caballo por chicuelinas al paso. Tras las varas de Tito Sandoval y las banderillas, mostró falta de fuerza el de Miura, por lo que tendía a defenderse en los trastos. De hinojos comenzó su obra Leal en el centro del anillo, apostando por el animal, pero éste era muy desagradecido en su embestida. Le quería bajar la mano el torero, y logró incluso robarle algunos muletazos de buen trazo. Mucho mérito la obra de Leal. Tras una media estocada, hubo petición no atendida, por lo que Leal dio la vuelta al ruedo.
Entrega sin eco de Colombo a la media altura del cuarto, el toro de la merienda
De 630 kilos era el cuarto de la tarde, segundo del lote de Colombo, que derribó al caballo y a punto estuvo de herir al Gustavo Martos. Embistió con la cara alta en banderillas el toro, que se las hizo pasar al venezolano palos en mano, pero al final solventó bien el tercio. Ser el toro de la merienda afectó a la conexión de la faena del joven, que se entregó y le pudo al toro. Un estoconazo puso fin a la obra, con petición leve no atendida.
La guardia de la espada en el quinto deja sin premio a Leal
Con la cuerna abierta el quinto, un toro al que saludó con la mano vendada tras cortarse Leal con la espada en el animal anterior. Muy difícil en el viaje el toro, que embistió siempre sin humillar, con la cara alta, al que dejó una obra gallarda el torero galo. Se dio un arrimón en el final de obra, pero una estocada que hizo guardia lo dejó sin premio. Requirió de un descabello.
Colombo corta una oreja más al sexto
También dejó variedad capotera Jesús Enrique Colombo para saludar al sexto, último toro de la feria, y luego quitó por zapopinas. Empujó el animal en el caballo. Al público fue un caluroso brindis, y luego tiró de la inercia que tenía el animal para dejar series de conexión por ambos lados y un final de obra de cara al tendido. Aprovechó la transmisión del toro para lograr llegar con fuerza arriba. El estoconazo final puso en sus manos un nuevo premio para abrir la Puerta Grande.
FICHA DEL FESTEJO
Plaza de toros de Pamplona. Última de la Feria del Toro. Corrida de toros. Lleno.
Toros de Miura.
Rubén Pinar, herido.
Juan Leal, ovación en el que lidió por Pinar, vuelta al ruedo y ovación.
Jesús Enrique Colombo, oreja, silencio y oreja.
FOTOGALERÍA: EMILIO MÉNDEZ
