El ganadero burgalés Antonio Bañuelos era el encargado de lidias en la festividad del Patrón en el coso oscense, donde se dibujaba un paseíllo internacional con Antonio Ferrera, Joselito Adame y Jorge Isiegas, que tenía en su tierra la oportunidad de volver a reivindicarse en la primera de abono de la Feria de la Albahaca.
Ferrera tira de oficio y veteranía para pasear la oreja del abreplaza de Bañuelos
El primero de Bañuelos resultó incierto de salida, sin entrega en el capote de un Antonio Ferrera que optó por la brega y el cuidado para que fluyeran sus virtudes. Y éstas salieron en la muleta, donde lo consintió mucho el extremeño hasta llegar al punto de la exigencia. Entonces aprovechó Antonio para tirar de veteranía y oficio con lo poco que le daba el animal. Una estocada contundente facilitó el paseo de la primera oreja de la tarde.
Joselito Adame entiende y cuaja la gran clase del segundo de Bañuelos, al que desoreja
Enseñó su clase de salida el segundo, que tuvo entrega y codicia en un brillante saludo a la verónica de Joselito Adame que remató rodilla en tierra, con mucha torería. Apretó en el jaco el de Bañuelos, al que quitó Adame por chicuelinas antiguas, calando mucho en el tendido. Con la muleta, el mexicano entendió a la perfección al animal, cuya clase invitaba a cuajarlo despacio. Lo hizo Joselito con la mano derecha, haciendo que la faena tomase vuelo. Pero fue al natural donde llegó lo más rotundo, que remató con unas ceñidas manoletinas y un estocadón en la suerte de recibir que tiró al toro sin puntilla. Dos orejas para el mexicano y una ovación para el toro en el arrastre.
Una fuerte oltereta al tirarse a matar merma a Isiegas, que escucha silencio con el tercero
Al tercero, que resultaría ser otro buen toro, lo saludó Jorge Isiegas con dos largas cambiadas en el tercio y con un ramillete de verónicas bien compuestas. Volvió a torear de capa para quitar también por verónicas el aragonés, y demostró su decidida actitud con los tres péndulos que sirvieron para iniciar su faena de muleta. Animoso y dispuesto, puedo extraer algunos muletazos estimables de un toro que se fue yendo muy a menos. Hasta que a la hora de matar, se tiró Isiegas a cuerpo limpio, llevándose una fortísima y fea voltereta de la que, afortunadamente, no pareció resultar herido. Eso sí, quedó tan magullado que le costó matar al de Bañuelos y todo quedó en silencio.
Ferrera busca el ralentí y el gusto con el soso cuarto, pero el animal no tiene fondo
Con el cuarto, un animal soso y muy en el límite de la fuerza, tuvo que sacar la varita mágica Ferrera para mantenerlo con inteligencia. Apenas exigió el extremeño con el capote y fue en la muleta donde quiso jugar la carta del buen gusto y el ralentí. Y lo consiguió por momentos, pero sin llegar a levantar el vuelo de la faena. Falló con la espada, dejando media estocada al segundo intento, y todo quedó en palmas.
Joselito Adame completa su tarde con una oreja más del noble quinto
Noble, muy noble fue el animal de Bañuelos que salió en quinto lugar, con el que anduvo muy fácil y poderoso Joselito Adame desde los lances del saludo. Muy metido en la plaza y muy entregado al tendido, se ganó a las peñas que poblaban los tendidos, que terminaron coreando las tandas al grito de «Joselito, Joselito». Dejó una estocada en buen sitio, pero tardó en caer el toro y fue una oreja la que paseó finalmente el mexicano.
La actitud de Jorge Isiegas hace imposible que se le escape el triunfo con el sexto
También el sexto, con el hierro de Antonio Bañuelos, tuvo buenas condiciones, pero fueron la fe y la entrega de Jorge Isiegas las que hicieron que pasease finalmente una oreja. Con empaque manejó el capote el maño, pretendiendo siempre brillar en todo. Con la muleta siempre se mostró por encima, con una actitud de triunfo que hizo imposible que se le escapase. Mató de una estocada y paseó una oreja.
FICHA DEL FESTEJO
Plaza de toros de Huesca. Feria de la Albahaca, primera de abono. Corrida de toros. Casi lleno en tarde calurosa.
Toros de Antonio Bañuelos. Con calidad y nobleza en general. El enclasado segundo aplaudido en el arrastre.
Antonio Ferrera: oreja y palmas.
Joselito Adame: dos orejas y oreja.
Jorge Isiegas: silencio y oreja.
FOTOGALERÍA: EMILIO MÉNDEZ