LA CRÓNICA DE GIJÓN

Las virtudes de la entrega


jueves 13 agosto, 2015

Padilla y El Fandi aprovechan las virtudes de una manejable corrida de Sánchez Arjona con dos ovaciones para El Cordobés

Padilla y El Fandi aprovechan las virtudes de una manejable corrida de Sánchez Arjona con dos ovaciones para El Cordobés

 La entrega es, en si, una de las mayores virtudes que puede
apreciarse en el toreo. Se llega a la comunión entre todos los actores a través
de la entrega, se produce la magia sólo con el concurso de la entrega y aparecen
la clase y la calidad cuando la entrega se hace presente. Es una virtud, dicho
está, pero encierra ésta otra muchas que emanan de su significado y subyacen en
su presencia para darle sentido a una tarde
aunque en ocasiones carezca de
fondo.

No fue el caso de hoy en Gijón. La entrega era necesaria en un
plomizo día agosteño que teñía de gris humedad los huesos de los que pagan. Lo
fue para que se hicieran presentes otras musas de lo interesante, como la
atención y el respeto. Tres toreros de célebre nombre se plantaban en El Bibio
entre el cariño del tendido. Tal vez no fueron los más finos estilistas, ni los
más profundos del planeta toro, ni los más rotundos del escalafón; pero
derrocharon entrega
, cada uno en el aire que le otorgó algún dios, cada uno con
el sello que anuncia su nombre. Pero no hubo un miserable silencio ni cuando se
apagaron los toros.

Éstos, los bovinos, llevaron la enseña de Sánchez Arjona, y todos,
sin dejar uno, tuvieron virtudes para propiciar las obras
. Unos en calidad,
como primero y cuarto; otros en bravura, como el codicioso segundo, y otros en
la humillación, aunque no durasen, como tercero y sexto. Todos ellos
propiciaron que se entregase una terna loca por triunfar porque lo llevan en
vena.

Lo lleva Padilla, cuya actitud de ataque y ambición de aplausos le
llevan a devolverle el cariño al que ha pagado la entrada. Cuatro largas de
rodillas, una media sin levantarse, un tercio de banderillas buscando el
espectáculo que calentase el tendido que se mojaba. Entrega la que ofreció el
Ciclón
. La tuvo también el inicio de rodillas
con la flámula, que le amarró el morro al piso con la diestra para que se
deslizarse con clase el animal. Desorejó al de la clase Padilla, que fue bravo
en sus ademanes, codicioso en la intención y exigente en el fondo.
Extraordinario fue el tranco del quinto galopando en banderillas, volcando la
cara en la muleta cuando viajó por el piso. Pero la entrega que regalaba el
toro tenía minutos contados y terminó desentendiendo los finales con un Padilla
ya bullidor.

También el tercero, una pintura de toro, tuvo la
entrega precisa en el capote, en el penco, en las carreras con que alivió El
Fandi su afán de no perseguir cuando sintió el buen trancazo. La tuvo sólo
hasta que se echó David con esperanza la muleta a la mano diestra y allí se
quedó sin ella el animal bien hecho y reunido. Con el sexto, que hubiese
agradecido más que lo esperase David, se entregó el granadino al toque, al
trazo empujado y a la repetición en los cites para que tuviera argumento el
tendido
. Todo con la entrega de uno de los toreros con más facilidad del escalafón
para entender a los toros. Se entregó El Fandi a Gijón, aunque no fuera su
mejor tarde en este ruedo, y le devolvió el cariño El Bibio, que exigió las dos
orejas.

Ninguna cortó El Cordobés, que lanceó con
soltura, muleteó con suavidad y se acopló por momentos a la embestida del
abreplaza. Muy a su aire, muy a su sello para dar lo que de él se espera.
Porque fue todo entrega un Manuel que conecta con el que paga la entrada, como
lo hizo sin duda con el cuarto embestidor, que se le fue tras el trapo cuando
se lo dio por abajo. Hoy le tocó no triunfar, pero fue fiel a sí mismo.

Lo fue la terna al completo, que le devolvió a
esta plaza el cariño que les tiene. Y cuando tiene virtudes la entrega, no hay
que ponerle peros. 

Gijón, Corrida del 13 de agosto de 2015 from Circuitos Taurinos on Vimeo.

FICHA DEL FESTEJO

Plaza de toros de Gijón. Cuarta de la Feria de Begoña. Corrida de toros.

Seis toros de Sánchez Arjona. Franco, fijo y noble el manejable primero, humillado y bravo el segundo; de buen fondo y escasa duración el tercero; con calidad y prontitud el buen cuarto; de calidad en los embroques y desentendido final el quinto; dormido en las llegadas pero humillado el sexto.

Manuel Díaz «El Cordobés” (verde botella y oro): ovación y palmas tras aviso. 

Juan José Padilla (blanco y oro): dos orejas y oreja. 

David Fandila «El Fandi” (grana y oro): ovación y dos orejas. 

FOTOGALERÍA: EMILIO MÉNDEZ