Queremos hablar con otro de esos novilleros que hay que marcar en rojo en este Alfarero de Oro. Se trata de Villita, novillero toledano que abrirá la Feria de Villaseca con la novillada de Cebada Gago, una divisa que ya se encuentra en los corrales de dicha plaza de toros. Actuará junto a Jorge Molina y Miguel Zazo, dos novilleros que al igual que el toledano ya han pasado por plazas como Madrid.
Descolgamos el teléfono para conocer las impresiones de cara al festejo del próximo lunes. Saber en qué momento llega, como se siente y el objetivo que tiene en mente. Villaseca es una de esas plazas en las que el novillo imprime respeto, su seriedad está fuera de toda duda, de ahí que se valore mucho un triunfo en su ruedo. La emisión en abierto por CMM también ayuda a que de conseguirse un triunfo este gana en notoriedad.
Pese a no ser plaza de primera, Villaseca se ha ganado su hueco en el calendario taurino, de ahí que los novilleros acudan muy motivados y responsabilizados: «La verdad que voy con una motivación especial. Al final, la repercusión que tiene Villaseca es muy importante. Y siendo un cartel toledano, los tres saldremos a arrear y a demostrar que queremos ser el próximo torero de Toledo»
Una novillada como la de Cebada Gago es la ganadería con la que está anunciado el toledano, sin duda una novillada exigente, pero con un gran fondo de nobleza: «Estoy muy contento con la ganadería que me ha tocado. Por líneas generales, es una novillada que se deja mucho, aunque planteará dificultades, pero creo que tengo que resolverlas. Creo que soy capaz de estar a la altura del bueno, pero también dar la cara con el malo, Villaseca merece que esté al 150%»
Una temporada que pese al aumento de festejos no está siendo fácil, hay mucha competencia y los huecos son los que son: «Hasta ahora, he toreado cuatro novilladas con caballos, y ahora es cuando más empiezo a torear, tengo cinco más. Tengo sensaciones positivas: mi paso por Madrid no fue con suerte, la novillada de Aurelio Hernando se dejó poco. En la última novillada en Escalona, las sensaciones fueron muy positivas«
Ya queda atrás ese 2019 en el que debutaba con caballos, ahora uno mira hacia atrás y se da cuenta de lo rápido que pasan los años: «Desde novillero sin caballos, tuve proyección buena, y luego llegó el freno. También llegó la pandemia por medio. He tenido lapsus en mi carrera, y creo que las cosas pasan por algo y lo importante para mí es que he ido puliendo mis defectos«