EL TORO DE LA MERIENDA

Ser mesías internos cuando el lobo achucha


jueves 18 junio, 2015

Gijón es un ejemplo de contratación cuando el lobo ya asoma las orejas. Ya era hora de, al menos, ser mesías de la justicia entre nosotros cuando el peligro exterior nos achucha

Gijón es un ejemplo de contratación cuando el lobo ya asoma las orejas. Ya era hora de, al menos, ser mesías de la justicia entre nosotros cuando el peligro exterior nos achucha

Gijón es un ejemplo de contratación cuando el lobo ya asoma
las orejas. Ya era hora de, al menos, ser mesías de la justicia entre nosotros
cuando el peligro exterior nos achucha y nos exige confianza en nosotros
mismos. La Feria de Begoña es, cuanto menos, un guión interno al que debemos
tomar muy en consideración si, al menos, queremos perseverar internamente para
dar la imagen cualitativa que se merece nuestra historia. Y seguir
escribiéndola, a pesar de los pesares podemíticos, con letras justas y cabales.

Ejemplo de contratación. Esos son los seis carteles de El
Bibio: un serial donde se compendian las pinceladas triunfales de Madrid, a
pesar de la falta de López Simón. Las
pinceladas de Madrid, el renombre novilleril de los últimos tiempos, el clavel
de las figuras que pisarán una plaza clave en su campaña, la seriedad torista que
requiere todo serial justo y los nombres olvidadizos que San Isidro recuerda y
el estío se encarga de borrar de la mente.

Desde el poso con el que Robleño -a pesar de ser el torero de
la casa- dejó sabor torero en Madrid hasta el excelente camino veterano de
Eugenio de Mora o la apuesta porque Garrido entre en las Ferias que de
novillero se ganó. Y también el relumbrón de conjuntar en una Feria fechada en
medio del ajetreo estival a todas y cada una de las figuras y el cartel
estrella de un 2014 triunfal: Ponce, Juli y Perera.

Y también desde la dureza imprescindible de dos corridas
toristas en medio de seis festejos. Eso es cuidado a la diversidad y a la
riqueza taurómaca del campo bravo. Esa que no se consigue ni en mil y una
elecciones: riqueza natural de la que hacer honra en nuestras Ferias y de la
que Gijón ahora también es ejemplo. Ejemplo de contratación justa y de lógico
testimonio interno ante la que se nos avecina.